Para diputados de cuatro de las ocho fracciones del Congreso, el nombre de Carlos Ricardo Benavides no está ligado al cargo de ministro de la Presidencia, a pesar de que la presidenta de la República, Laura Chinchilla, ratifique cada día su apoyo al jerarca.
Legisladores del Movimiento Libertario, el Partido Acción Ciudadana (PAC), el Partido Accesibilidad Sin Exclusión (PASE) y el Frente Amplio, creen que Benavides ya no puede ser el canal cuesta de Moras y Zapote.
Ayer Chinchilla volvió a defender a Benavides. “Pero ¿cómo se va a ir un ministro de la Presidencia por un dimes y diretes con una legisladora?”, expresó Chinchilla.
De momento no hay señales de que se aplaque el incendio que quema los puentes entre el Poder Ejecutivo y el Congreso por supuestas presiones de Benavides para evitar la reelección del magistrado de la Sala IV Fernando Cruz.
La denuncia de la diputada del Movimiento Libertario, Patricia Pérez, sobre el supuesto intento de Benavides por influir para que votara contra el magistrado, llevó ayer el presidente del Congreso, Víctor Emilio Granados, a unirse a los que deslegitiman al ministro.
“Si doña Patricia dice que recibió esa llamada, yo le creo, porque la conozco. Él debe dar explicaciones satisfactorias sobre qué llamadas realizó y a quiénes. Mientras tanto, para mí no es un interlocutor válido”, dijo Granados ayer.
En tanto que diputados del PAC, Libertario y Frente Amplio exigen la salida del ministro.
“Hemos perdido toda confianza en Carlos Ricardo Benavides; él está más interesado en su agenda personal que en un diálogo transparente”, dijo el diputado del Frente Amplio José María Villalta.
“Le pedimos a la señora presidenta que separe del cargo al señor Benavides y, en caso de no hacerlo, para todas las valoraciones, él no es un interlocutor válido ni lo reconocemos como la vocería de Casa Presidencial”, afirmó la jefa del PAC, Yolanda Acuña.
Benavides rechaza cualquier injerencia en la decisión de los diputados y alega que lo que dice la legisladora Pérez “no es cierto”, aunque ella llegó incluso a ofrecer su teléfono a la presidenta con registro de llamadas y mensajes de texto como prueba.
“Yo no podría dar una respuesta contundente a esto y te voy a decir por qué. Bueno, más allá de lo que he dicho, obviamente Carlos Ricardo sigue teniendo mi confianza, es el ministro de la Presidencia y no he visto absolutamente ningún elemento de irregularidad en su comportamiento que justifique el retiro del mismo”, expresó la mandataria. Colaboró la periodista Mercedes Aguero