El congresista Rodrigo Pinto salía muy poco en las fotos. Nunca le gustó ser diputado, hasta dijo que fue un error, pero si algo lo empujó a renunciar el lunes al Congreso, fue que no se nombrara a su candidato a gerente de puertos de Japdeva.
El legislador por Limón del Partido Liberación Nacional (PLN) declaró que había acordado con la presidenta, Laura Chinchilla, y con el ministro de la Presidencia, Carlos Ricardo Benavides, ampliar el nombramiento del gerente de puertos Danny Morris.
Sin embargo, el jueves 7 de febrero, los directivos de la Junta de Administración Portuaria y Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (Japdeva), nombraron a otra persona, lo que provocó el disgusto del diputado.
“Hubo un nombramiento en la gerencia portuaria que no me gustó. Eso es un insulto al pueblo de Limón y eso no me gustó”, afirmó.
Esa otra persona es José Aponte, el exasesor del presidente ejecutivo de Japdeva, Allan Hidalgo.
Hidalgo nombró a Aponte con el visto bueno de la Presidencia, dijo el viernes Benavides.
Para Pinto, la acción fue una falta de respeto, pues, a su entender, su recomendado iba a seguir en el puesto por seis años más.
“Tomé la decisión de que si son así las cosas, yo he sido muy fiel al Gobierno, he sido muy fiel a la presidenta (Chinchilla), pero si no se respetan las cosas, nada estoy haciendo”, aseveró.
Y como sintió que nada estaba haciendo, se le colmó la paciencia y renunció el lunes a su cargo.
Pinto aseguró que había claridad en que la reelección de Morris se daría, y expresó que la negativa es una “jugada” que le hicieron. El siguiente es un extracto de la conversación que sostuvo Pinto con La Nación el viernes.
¿Usted habló con doña Laura, o con el ministro Carlos Ricardo Benavides sobre esta situación?
Desde antes, sí, después de que me hicieron la jugada no. Pero estábamos claros de que el nombramiento se iba a dar y no se dio.
¿Su propuesta era postular a un limonense?
No era propuesta, era la reelección del mismo gerente que estaba, que es de Limón.
¿Por qué cree usted que era una bofetada para el pueblo de Limón?
Porque yo creo que si hay gente capaz en Limón, no creo yo que sea bueno nombrar a una persona que venga de Puntarenas (...). Limón debe manejarse por limonenses.
“Y si yo ya no voy a estar en confianza, no me va a gustar la cosa, mejor me voy, porque yo he sido demasiado leal, para que no se respeten las cosas.
Y eso, ¿usted lo había hablado con doña Laura y con don Carlos Ricardo Benavides?
Es correcto.
Se va un poco molesto.
Definitivamente (...). La lealtad no juega solo de un lado. Cuando usted es fiel, usted espera lo mismo del otro lado. Y si no se da, entonces usted no está haciendo nada.
La otra cara. En Casa Presidencial, el ministro Benavides asegura que el nombramiento del gerente de Japdeva se hizo respetando la decisión técnica del presidente ejecutivo de la institución, Allan Hidalgo.
“Don Rodrigo Pinto nos conversó a la presidenta y a mí; dijo que quería una persona oriunda de Limón como gerente portuario, y ante ese planteamiento..., nosotros no somos quienes decidimos si se nombra o no un gerente portuario en Limón”, explicó Benavides.
El jerarca agregó que la designación es una prerrogativa de la Junta Administradora de Japdeva, y agregó que Hidalgo le dijo tanto a él como a la mandataria, que ya tenía su candidato y que eso se respetó.
Por su parte, Hidalgo, afirmó que la decisión de contratar a Aponte fue técnica, en vista de los retos que tiene por delante la institución, con compromisos programados por $2.100 millones en desarrollo de infraestructura, ampliación y maquinaria.
“Lo que puedo decir es que pedí que se me apoyara en el nombramiento de un gerente de orden técnico, necesito fortalecer a Japdeva”, dijo el jerarca respecto de la decisión que desató el enojo de Pinto.
Por ahora, Pinto, enojado con el Gobierno, seguirá asistiendo al Congreso, hasta el 30 de abril.