Casas y terrenos caros frustran sueño de techo propio en la GAM

Alquiler es la única opción para clase media, ante falta de dinero para comprar

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El sueño de tener casa propia en la Gran Área Metropolitana (GAM) es inalcanzable para muchos solteros y familias de clase media, debido al alto precio de las viviendas que aspiran a comprar.

A esta dificultad se suman las condiciones que establecen las entidades financieras para otorgar créditos. El monto de la prima y de las cuotas excede, en muchos casos, la capacidad de pago de este grupo poblacional.

Un estudio de la Fundación Promotora de Vivienda (Fuprovi) revela que el costo en materiales de construcción y el precio por metro cuadrado construido se disparó en la última década en los cantones de la GAM.

Escazú y Santa Ana encabezan la lista de municipios con las propiedades más caras, cuyos precios oscilan entre $2.200 y $2.800 por m². En tanto, en el cantón Central de Heredia el valor promedio de una propiedad ronda los $120.000 (¢60 millones).

“He buscado casa, pero las opciones son limitadas y para una persona soltera las cuotas son inalcanzables. Es por eso que he optado por el alquiler de vivienda”, comentó ayer Jonathan Mora, quien reside en Heredia.

Sin embargo, la limitación de oportunidades no solo depende del estira y encoge en los bolsillos, sino de cómo crecen y se transforman las ciudades y las necesidades de quienes las habitan.

“La clase media sale en busca de opciones de vivienda con ciertas expectativas, como garaje para dos carros y ciertas comodidades y ubicaciones que encarecen los costos de las casas, y que pueden rondar los ¢50 millones”, explicó el investigador de Fuprovi, Franklin Solano.

Según la zona. El contraste entre expectativas y precios también depende de los servicios y comercios de cada zona.

“La mala planificación de la ciudad incrementa los costos de los precios de la vivienda. Cantones como Tibás, Moravia, Escazú y Santa Ana al tener un fuerte auge comercial, también son más caros”, añadió el investigador Solano.

Según la Encuesta de Confianza del Consumidor de la Universidad de Costa Rica (citada por el estudio de Fuprovi), el 60% de las personas opinan que este no es un buen momento para comprar propiedades.

La Cámara de Bienes Raíces apunta que, comparado con Panamá y Nicaragua, el valor de los materiales de construcción es un 200% más elevado en Costa Rica.

Esta organización alega que el alza en los precios de las viviendas también responde al incremento del impuesto solidario (para casas de lujo) y a que el costo de la tierra no regresó al nivel que tenía antes de la crisis inmobiliaria del 2009.

“Ahora se requiere del apoyo de dos o más ingresos en el hogar para acceder al financiamiento, porque en Costa Rica no existe un verdadero plan de vivienda a interés bajo”, indicó la presidenta de la Cámara, Aleyda Bonilla.