Colaboradora
Frente a Oprah Winfrey, todos los artistas se sentían tan cómodos que hicieron las más impactantes confesiones.
Uno de ellos fue Tom Cruise, quien brincó en el sofá del set , en mayo del 2005, al declarar y hacer público su amor hacia la actriz Katie Holmes.
Otro de las entrevistas que se hizo eco en todo el mundo fue el encuentro que propició Oprah en su set, en donde reunió a la escritora Terry McMillan y a su exesposo Jonathan Plummer, para que aclararan todas los rumores que rondaban su separación.
Esto sucedió luego de que Plummer terminara el matrimonio de seis años con la escritora de Michigan, según dijo tras darse cuenta que era gay.
En el 2006, la actriz Kirstie Alley también escogió al show de Harpo Productions para hacer pública la lucha por bajar de peso que había iniciado en el 2000.
Alley se encontraba ya en 200 libras cuando decidió desfilar en un biquini rojo frente a Oprah y millones de espectadores.
Un caso muy conmovedor fue el de la exestrella infantil Mackenzie Phillips , cuando reveló –en setiembre del 2009– que había estado guardando un secreto familiar durante 31 años y dijo a Oprah que tuvo una relación incestuosa por 10 años con su padre, la leyenda del rock John Phillips.
Histórico. No obstante, el gran hit de Oprah –y que no fue en su set – fue frente a la superestrella Michael Jackson , en la que fue la entrevista por televisión más vista a nivel mundial, con 90 millones de espectadores, según su sitio de Internet .
En medio de escándalos por acusaciones de abuso sexual, y luego de 14 años de guardar silencio, Jackson aceptó concederle una entrevista a Winfrey. “Ha sido la entrevista más emocionante que había hecho. Pensé que podía ser su amigo, porque sentí que era muy honesto”, dijo Winfrey.
En el 2009, Jackson falleció y en el 2010, la madre de Michael, Katherine, y sus hijos Prince, Paris y Blanket, estuvieron en el show .
Drásticos cambios. No todo se ha tratado de famosos en el programa de la presentadora de Misisipi. Oprah ha logrado acercarse a muchas personas en Estados Unidos.
Un ejemplo de esos programas con los que buscó hacer la diferencia data de 1987, cuando con solo seis meses de estar al aire realizó un show en honor al cumpleaños del Dr. Martin Luther King Jr., en el condado de Forsyth, Georgia; en esa ciudad la población se había ganado la reputación de ser racista y se decía con orgullo que ahí no había vivido un negro en 75 años.
Oprah habló con la audiencia del tema, y después de que varios miembros del público manifestaran que no querían una comunidad mestiza o que tenían “miedo de la gente negra”, una mujer valiente dijo que era tiempo del cambio.
Según el sitio en Internet del show , hace unos meses los productores volvieron a Forsyth, y ahora es uno de los condados más ricos en EE. UU. y más de 7.000 ciudadanos afroamericanos viven allí.