'The Leftovers' ve su final a pura desesperanza

Sin certezas: así llegan al capítulo final quienes han seguido el descorazonador drama de HBO. ¿Se responderán las preguntas?

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En el primer programa de The Leftovers todas las preguntas giraban alrededor de aquellos que se fueron. Sin embargo, con el último capítulo ya encima, la interrogante más bien tiene que ver con los que se quedaron.

El "¿por qué ya no están?" dio paso al "¿por qué nosotros seguimos aquí" en esta primera temporada de la serie dramática de HBO, cuyo décimo y último episodio se transmitirá en Latinoamérica este domingo 7 de setiembre, en un cierre simultáneo con Estados Unidos.

Si a estas alturas no se colgó de la historia (de apenas 10 capítulos), mejor evite el final, espérese a su segura retransmisión dentro de unos meses... y así evite una crisis mental.

Y es que The Leftovers es una serie pensada para estrujarle el alma, incomodarlo, dejarle un mal sabor de boca e inundarle la cabeza de preguntas incómodas. ¿Entonces, por qué verla? Pues porque el buen televidente es, ante todo, masoquista.

¿Y es que cómo no sentirse golpeado al ver que todos los personajes principales viven existencias miserables? ¿Cómo no preocuparse al ver que todos ellos están en una picada emocional y poco les falta para estrellarse contra las piedras?

Claro, todo esto se entiende a partir del rasgo más particular de esta historia: la desaparición súbita e inexplicable del 2% de la población mundial. Y ahí también está el gancho de la serie, pues la atención no está en los desaparecidos, sino en sus seres queridos, obligados a vivir su "normalidad" en un mundo que, desde luego, ya no es nada normal.

El comisario Kevin Garvey (Justin Theroux) es quizá el personaje cuya descomposición ha impresionado más. El representante de la ley se suponía era el llamado a la cordura en la ficticia ciudad de Mapleton, Nueva York. Sin embargo, semana a semana su comportamiento se ha tornado más errático sin que él (ni nosotros, los angustiados televidentes) tengamos idea de lo que le sucede.

Un caso contrario es el de Nora Durst (Carrie Coon), la mujer con todo el derecho de perder la cabeza tras quedarse, en un segundo, sin su esposo y dos hijos. Siendo la mayor damnificada del pueblo por las desapariciones, Nora es quien "mejor" ha racionalizado el evento que afectó las vidas de todo el planeta.

Kevin, Nora, el sufrido pastor Matt (Christopher Eccleston), la silenciosa Laurie (Amy Brenneman) y sus insoportables "hermanos y hermanas" de blanco de la comunidad de los Remanentes Culpables llegan a este último capítulo de la temporada sin que tengamos una idea de qué sucederá con ellos... aunque, sea lo que sea, no será nada bueno.

Eso sí, ya estamos avisados de que la trama no terminará aquí, pues HBO confirmó que habrá una segunda temporada en el 2015... así, a seguir sufriendo.