De malo a galán y de regreso. Así ha sido recientemente la carrera del actor mexicano Salvador Zerboni, quien actúa en las novelas Quiero amarte y La mariposa , que se transmiten por canal 6.
En ambas producciones, Zerboni cambia radicalmente su actuación y muestra su conocida faceta como antagonista ( Quiero amarte ) y explora una totalmente nueva: el bueno de la historia en la serie La mariposa.
Sobre esta experiencia y cambios en su trayectoria habló el artista con Viva desde México. Además, adelantó que tiene pensado visitar Costa Rica con una propuesta muy sensual de teatro.
A continuación, un extracto de esa conversación.
¿Cómo fue la experiencia de interpretar a Horacio en Quiero amarte ?
No es el mero mero antagónico, pero tiene sus facetas malas y buenas. Es un personaje muy fresco con un lado humano que tampoco estoy acostumbrado a hacer; fue muy padre porque toqué unas hebras más sensibles que no conocía; llevé al personaje a lugares recónditos que no había inspeccionado.
¿Qué explotó Salvador de la personalidad de Horacio?
Van a ver a un hombre que dice que vale más un golpe a tiempo que diez a destiempo. Se van a sorprender con su particular forma de ser.
También lo vemos en La mariposa ; es una interpretación muy distinta a sus reconocidos malos de la historia...
Sí, estamos saliendo al aire apenas. Es un personaje diferente porque por primera vez hago un protagónico en el que soy bueno. Es un giro importante a la carrera, pero ha resultado muy divertido porque exploro una faceta con un personaje que hace todo dentro de la ley, algo diferente a lo que hago con otros personajes.
¿Qué nos tiene preparado el detective Smith en La mariposa ?
Va a pasar muchos corajes tratando de encontrar a la mariposa. También se va a enamorar de una mujer que tiene uno de los trabajos más viejos del mundo.
Esa versatilidad de ser el bueno después de tantos malos, ¿cómo la sintió, es más trabajo ser el bueno?
No requiere tanto trabajo porque en mi vida cotidiana digamos que soy una buena persona, fue muy fresco el personaje. No puedo negar que a veces me daban ganas de contestar con las entrañas como estoy más acostumbrado a hacerlo, pero en La mariposa todo era más de besito y apapacho, así que hubo que ampliar el histrionismo.
En las escenas candentes, ¿cuál prefiere: las del bueno o las del malo?
¡Ah!, les gustan mis escenas sensuales. Pues mira, hay que disfrutar de todo: el antagónico es más agresivo y el otro es más erótico y sensual; en cada escena hay que vivir el personaje y el trato porque nunca es el mismo. Ya tengo pensado volver a hacer personajes antagónicos pronto.
Tiene una propuesta teatral llamada Sin censura . ¿Cómo le ha ido con este trabajo?
Muy bien; puede ser que pronto estemos allá en su país. El proyecto tiene a varios compañeros de Televisa como David Zepeda y William Levi. No les voy a adelantar mucho; es muy sensual, pero mientras tanto no se pierdan Quiero amarte y La mariposa.
También le gustan las artes marciales mixtas. ¿Así es como mantiene su cuerpo?
¡Me encantan! Fíjate que acabo de pelear en Las Vegas en la UFC (Ultimate Fighting Championship); tuve la oportunidad de pelear en el octágono frente a 16.000 personas; salí un poco golpeado pero gané. Me gustan las artes marciales y pude combinar este deporte con la televisión y salió este producto que ha sido muy exitoso.
De todo ha hecho en su carrera, interpretó a dos personajes gay. ¿Eso no lo cohibió?
Por el contrario, exploté todo el talento; de eso se trata: las inseguridades se quedan en la casa. Tengo un gran séquito de seguidores gais y, por eso, decidí representar estos personajes. Traté con todo respeto de expresar lo que pasa un hombre por dentro cuando tiene una preferencia sexual diferente a la “acostumbrada”.
¿Cómo está el corazón de Salvador? ¿Está enamorado?
Está mejor que nunca, todo bien, todo viento en popa. Ese corazón está abierto para todo su país hermoso y espero la invitación para conocer pronto a todas esas mujeres divinas.
¿Cuándo podría estar en Costa Rica con Sin censura ?
Pronto, espero en unas dos o tres semanas cerrar algo, pero les aviso cuando tenga algo conciso.