El fútbol se entiende a través de los datos de Míster Chip, también conocido por su nombre: Alexis Martín Tamayo.
El periodista nacido en Extremadura se ha ganado el corazón de los aficionados del deporte rey, gracias a los datos en sus estadísticas que no mienten y son de alardear, así como la cantidad de sus simpatizantes.
El ingeniero en telecomunicaciones cambió su profesión por el periodismo y ahora acumula cerca de dos millones de seguidores en su cuenta de Twitter. Alexis se describe como un hombre alegre que ama sus pasiones que, hasta ahora, lo han llevado a todos los rincones del mundo donde se dispute un balón del fútbol.
El español asegura que no tiene clubes favoritos pero se desgarra cada vez que la Selección Española sufre sobre la gramilla y tampoco olvida al cuadro de su barrio, el Badajoz.
Costa Rica es la tercera parada del elenco de Fuera de Juego , que ha dado una gira alrededor del istmo: primero fue Panamá, en abril; luego Guatemala, en junio.
El programa compuesto por los periodistas Andrés Agulla, Ricardo Ortiz, Fernando Palomo, Tamayo y el exjugador Mario Alberto Kempes ha cosechado adeptos alrededor de toda Latinoamérica, por su análisis crítico y anecdótico del deporte
Usted empezó a tomar datos a los ocho años, antes de iniciar el Mundial de España 1982. ¿Cómo nació la pasión por el fútbol?
Es curioso porque a mis papás nos les gusta el fútbol. El primer partido que yo vi en la televisión fue de la Liga Española, claro, un Real Madrid contra el Atlético de Madrid. Fue gracias a unos amigos de mis padres, una pareja que fueron a cenar a mi casa. El amigo de mi padre era muy futbolero y ese día era el Derby de Madrid. El amigo de mi padre me usó como excusa para salirse de la cena. Nos fuimos a una habitación para ver el encuentro.
”Empecé a tomar notas, como que me faltaba algo, no solo podía ver el partido porque me aburría y sentía que tenía que documentarlo de alguna manera. Primero, apunté todo a mano con una libreta; luego, digité la información y recuperé el tiempo perdido a través de las hemerotecas. Así empezó todo”.
¿Cómo inició su carrera en el periodismo deportivo?
Fue una situación curiosa: fue en 1998. En ese entonces, había un sorteo para definir los partidos de cuartos de final de la Champions League y estaban varios equipos. Apliqué la estadística e intenté predecir cuál era el rival del Real Madrid.
Me basé en las condicionantes, como, por ejemplo: dos equipos del mismo país no podían coincidir, equipos que ya habían jugado previamente en el torneo no se podían volver a enfrentar. Utilicé esas reglas para determinar cuál era la probabilidad más elevada. Me di cuenta de que el Real Madrid iba a enfrentar al Bayer Lerkusen y mandé la información al periódico AS , nunca había trabajado con ellos ni nada, sola la envié. Alguien en la redacción la vio y tomó la decisión de publicarlo en portada.
”Era la primera vez que yo mandaba algo al periódico, pero un loco se fío de mí y lo puso en portada. La suerte es que al día siguiente se hizo el sorteo y acerté. Después me llamaron y empecé a colaborar con ellos de manera más habitual”.
Entre tantos datos y estadísticas, ¿queda espacio para sufrir por el fútbol?
(Se ríe) Yo solo sufro cuando juega la Selección Española y además cuando son partidos decisivos; por ejemplo, el otro día sufrí contra Italia porque se está jugando prácticamente la ida al mundial de Rusia 2018.
”Recuerdo hace cuatro años que había que ganar en Francia para ir al Mundial de Brasil 2014. En ese entonces sufrí muchísimo en el trámite, pero al final se ganó con un gol de Pedro ahí en Saint Denis (estadio francés).
”En las últimas dos finales de la Champions League no he sufrido, en realidad. Me daba igual si ganaba el Real Madrid o el Atlético; en la anterior, el Barcelona la gano fácil ante la Juventus. En el fútbol de clubes el único que me hace sufrir es el equipo de mi pueblo, el Badajoz de Extremadura.
¿Dónde estaba el 11 de julio del 2010 cuando Andrés Iniesta le marca ese gol a Holanda y España se corona campeón del Mundo en Sudáfrica?
Estaba en el Estadio Soccer City, en Johannesburgo, y sufría mucho. Nunca antes había sufrido tanto por un partido de fútbol, la pasé fatal. ¡Fue el peor momento de mi vida! Después llega esa explosión de júbilo, esa enorme sensación única.
”Estaba haciendo una transmisión para el programa de radio Onda Cero y hay un momento en el que yo dejo de hablar, ya no sabía lo que pasaba, ni me importaba. Ignoraba lo que estaban comentando los compañeros. ¡España era campeona del mundo y no me importaba nada más!”
Usted ha visto a muchas generaciones del fútbol español: desde Butragueño y Zubizarreta, Xavi y Puyol campeones del mundo y ahora este equipo de jugadores jóvenes talentosos como Koke y Morata. ¿Con cuál de estos equipos se queda?
Obviamente, con la generación del año 2008 al 2012, esos 4 años mágicos en los que España ganó absolutamente todo (dos Eurocopas, una Copa Confederaciones y un Mundial).
”Casillas, Ramos, Piqué, Puyol, Xavi, Iniesta, Torres, Silva y Villa forman una generación irrepetible del fútbol español”.
¿El mejor jugador que ha visto de Costa Rica?
El primer recuerdo que tengo del fútbol costarricense son las atajadas de Conejo (Gabelo Conejo). No sé si el mejor, pero yo tengo una memoria muy grata de Conejo en el mundial de Italia; la verdad entre él y Hernán Medford hicieron historia.
”Luego Conejo vino a España a jugar con el Albacete y tuvo un papel muy destacado en la Liga. Evidentemente, no lo podemos comparar con la muchísima calidad de la Selección actual, digo, llegaron a cuartos de final de un Mundial; sin embargo, el camino lo inició esa generación del mundial italiano.