Los villanos también tienen sus seguidores

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Una larga fila en las afueras del cine Universal en San José, allá por 1978, es el recuerdo más emocionante que tiene Randall García de su niñez.

En ese momento, el pequeño de 10 años iba con su madre a ver [[BEGIN:INLINEREF LNCVID20140908_0008]]Star Wars: A New Hope[[END:INLINEREF]]. “Definitivamente marcó mi niñez, no solo me impresionó por los efectos especiales, sino por ser una película tan fuera de lo común”, recordó García, de 47 años, con entusiasmo.

Según el topógrafo, La guerra de las galaxias marcó sus gustos en televisión. La cercanía que llegó a sentir con Darth Vader lo hizo preferir siempre las caricaturas de superhéroes, aunque él se sentía atraído hacia los villanos de las series que veía.

“Ahora lo analizo desde otra perspectiva. El villano era siempre muy llamativo por todo lo que representaba”, afirmó.

El primer clic que hizo Randall con el personaje fue por medio de la voz del villano, interpretada por el actor James Earl Jones.

Herencia. Si de superhéroes y malos se trata, para Randall los mejores recuerdos de su infancia los pasó al lado de [[BEGIN:INLINEREF LNCVID20140908_0009]]Batman[[END:INLINEREF]], [[BEGIN:INLINEREF LNCVID20140908_0010]]Superman[[END:INLINEREF]] y los [[BEGIN:INLINEREF LNCVID20140908_0011]]Súper Amigos[[END:INLINEREF]], así como del robot Mazinger Z y los infaltables gigantes extraterrestres: Los Transformers [[BEGIN:INLINEREF LNCVID20140908_0013]].[[END:INLINEREF]]

“Siempre me han gustado las cosas algo complejas. Algunas series las veía en inglés aunque no estuviera entendiendo nada de lo que decían”, dijo.

Ahora, comparte sus gustos con Armando, su hijo de 12 años. “Nos sentamos a ver series de superhéroes juntos”, finalizó.