La ciudad de Phoenix, en Arizona, es conocida como la capital mundial de las motocicletas hechas a medida, esto gracias a que sus habitantes buscan presumir al máximo la imagen de sus distintos vehículos y motos.
La nueva serie de History Channel, Guerra en dos ruedas , reflejará muy bien ese estilo de vida, que se entremezcla de forma casi perfecta con la adrenalina, los robos de ideas y empleados, además de las destrezas de un grupo selecto de los modificadores de estos motores.
Ellos no solo son los reyes de sus talleres y de la carretera, sino que también buscan ser considerados por los simples “mortales” como los mejores en su característico estilo.
Es así como, cuando las pasiones y los orgullos chocan, es de esperarse que el estruendo se escuche en toda la ciudad, ese lugar del que estos artistas de las motocicletas se sienten dueños y señores.
Un buen exponente es Paul Yaffe, uno de los protagonistas del show , considerado como el “padrino” del grupo y creador de esta moda de personalización de motos. Sin embargo, sus detractores aseguran que su momento de gloria ya pasó.
Uno de ellos es John Shope –Yaffe se jacta diciendo que este fue su pupilo–, que se define a sí mismo como el rey de las transformaciones gracias a su proactividad y atractivos diseños. Él comenzó su carrera como escultor para luego especializarse en las motocicletas.
Por su parte, Len Edmondson, originario de Canadá, dejó de lado un negocio multimillonario para dar paso a su pasión: la reconstrucción de estas piezas, partiendo de líneas clásicas y contemporáneas.
Conocido como el novato, Kody McNew es el más joven del grupo, y no teme decir que tiene todo lo necesario para desbancar del trono a Yaffe y a Shope.
El quinteto se completa con Brian Jenkins, el único que es capaz de comenzar desde cero la personalización de las motos.
Precisamente, son estas personalidades tan disímiles las que hacen que el televidente quede enganchado con la trama del show , sin dejar de lado a las motocicletas.
Más allá de la pasión por los motores, Guerra en dos ruedas cumple otro de sus objetivos: rendirle un reconocimiento a los artistas que hay detrás de cada una de las transformaciones que se lucen a lo largo de las carreteras.