Fox pagó $12 millones por la diva que ya lloró con una concursante

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

“Al principio no estaba segura y luego pensé: en qué otro lugar podría ayudar a otros artistas, toda la experiencia que tengo en este negocio y por todo lo que he pasado y todo lo que he aprendido”.

Esa fue la reacción de la cantante, actriz y bailarina Jennifer López, cuando se oficializó su participación en American Idol.

“Pienso que debe ser divertido y, en realidad, es más divertido de lo que pensaba”, dijo la artista.

Pero, conforme transcurrían las primeras audiciones, López se dio cuenta de que su trabajo, por el cual Fox le pagó $12 millones, no era tan divertido como pensaba.

En uno de los episodios que ya se transmitieron en los Estados Unidos, los televidentes fueron testigos de cómo la diva no pudo controlar el llanto, tras escuchar cantar a una joven madre soltera, cuya hija sufre de hidrocefalia.

La esposa de Marc Anthony solo pudo reaccionar diciendo: “Cuando cantas, puedo sentirlo y me has provocado lágrimas”.

Ese se convirtió en el primer capítulo emotivo que captarían las cámaras, con lo que quedó claro que López estaba lejos de tomar el puesto como la jueza de hierro.

Dolida. “¡Dios mío, de verdad que odio esto. ¿Por qué firmé el contrato? Quiero irme a casa!”.

Así sufrió y reaccionó la nueva integrante del jurado, luego de rechazar a una participante que llegó a las audiciones en Nueva Jersey.

Con un dolor inmenso, la cantante se levantó para abrazar a la joven, en una muestra de que tendrá dificultades serias para ser severa, a la hora de decidir si apoya o no a un concursante.

Las historias entre los soñadores y ella parecen interminables, pues la mujer estadounidense de hijos puertorriqueños se volvió a poner de pie; esta vez, para consolar a una adolescente que lloró cuando la conoció.

No obstante, la actriz ya ofreció algunas señales de dureza. “Le decimos que sí a los que vienen a cantar. Debes trabajar en eso si quieres que te tomen en serio”, dijo, con cierta molestia, a una participante que se quitó la chaqueta para enseñar un biquini, con dos estrellas colocadas “estratégicamente”.