Con la salida de dos de los jueces originales del programa American Idol , muchos pronosticaron el cercano fin del show .
No obstante, el carisma que tanto el roquero Steven Tyler como Jennifer López le han aportado al espacio, ha sido un factor decisivo para que se mantenga como el programa número uno de la televisión estadounidense, en su décima temporada.
Según un reporte del diario The New York Times , el programa que busca a jóvenes talentos logró un aumento del 1% en el rating con respecto al año anterior.
Para muchos esta cifra puede parecer insignificante; sin embargo, la importancia radica en que, por primera vez desde el año 2007, el programa registra un aumento en su cantidad de espectadores y, además, logró reversar la tendencia continua al descenso.
Según datos de Nielsen Corporation, un total de 25 millones de personas sintonizan cada semana el programa en Estados Unidos, en busca de encontrar a la próxima gran estrella o, al menos, pasar un buen rato en el intento.
Cuando Simon Cowell, el rudo juez de camiseta ajustada, anunció su partida el año pasado, la mayoría creyó que era la sentencia de muerte para el show .
La búsqueda empezó y se barajaron muchos nombres de famosos; cuando se mencionó a Jennifer López hubo posiciones encontradas.
En uno de los momentos más difíciles de su carrera, después del fracaso de varios de sus sencillos, la cantante no se dio por menos y exigió $15 millones para dar el sí.
La producción llegó incluso a descartarla. “Sus demandas se salieron de las manos”, aseguró la revista People en esa época. Así que continuó la búsqueda. Sin embargo, tras intensas negociaciones, López accedió recibir $12 millones.
En setiembre del año pasado fue anunciada como la nueva jueza del show y, desde entonces, ha revitalizado su fama entre el público, aunque también ha sido criticada por ser “demasiado dulce”.