Disney –eterno vendedor de sueños– le tiene la medida bien tomada a los preescolares. Por eso, cualquier padre de niños pequeños puede dar fe de pocos programas que hay hoy en la televisión mundial con la fortaleza comercial de Doctora Juguetes .
Lo anterior no es cuento: no importa si se está en la tienda de departamentos más fina o en un almacén especializado en cuestionables imitaciones chinas, que igual el pasillo infantil estará lleno de productos basados –o pirateadamente inspirados– en Princesita Sofía, Jake y los Piratas de Nuncajamás y Doctora Juguetes, las tres series hoy insignia de Disney Jr. (por encima del incombustible Club de Mickey Mouse).
En el caso específico de la simpática niña con bata de médico, su éxito es tal que se ha convertido en el personaje afroamericano de ficción que más dinero genera, con ganancias por $500 millones, en el 2013, gracias a la venta de sus productos oficiales.
Lanzada con el título original de Doc McStuffins y producido para Disney por la compañía irlandesa Brown Bag, la serie ha sido no solo aplaudida por los niños, sino también por organizaciones que luchan contra el racismo.
Esta semana, Disney Jr. empezará a emitir episodios estreno, en los que la trama básica se mantiene: Dottie Doc McStuffins es una niña que quiere ser doctora, al igual que su madre. La pequeña se especializa en aliviar los males de juguetes rotos y dañados que cobran vida solo ante ella, gracias al especial estetoscopio de la pequeña.
Dado que el programa pareciera emitirse sin interrupción las 24 horas, los más chiquitillos de la casa pronto se manejan al dedillo a los amigos-ayudantes de peluche de la doctora: Felpita, el dragón tan valiente como torpe; Lambie, la oveja demasiado propensa a los abrazos; Hallie, la hipopótama enfermera, y Friolín, el temeroso muñeco de nieve. Y como buen show Disney, todos los tratamientos de la infantil galena se dan acompañados de una canción. De ahí que no extraña que a estas alturas muchos sean los padres de familia que se conocen de memoria la letra de Hazte un chequeo.