Cargada de trabajo entre próximas novelas con Telemundo, un disco y un musical en camino, considerada una auténtica mamá gallina y enamoradísima de su novio, el también actor Sebastian Rulli, la actriz de la novela La Patrona , Aracely Arámbula, conversó ayer con Viva el Tiempo Libre sobre su fugaz visita al país, y de cómo equilibra su carrera con su rol de madre.
Su visita se debe al lanzamiento de la colección de joyas del diseñador Daniel Espinosa, ¿cómo es este nuevo ámbito en el que usted también se estrenó como diseñadora?
Sí, la colección se llama Dulces sueños , y estoy muy contenta porque está inspirada en Daniel y Miguel, mis hijos. Así que es una línea infantil que la creamos pensando como mamá.
¿Qué se aprende de trabajar al lado de una actriz como Christian Bach y qué cosas pasan detrás de cámaras que no ve la gente durante el rodaje de La Patrona ?
El personaje de Antonia Guerra, el que hace Christian Bach, es un papelazo, lo hizo espectacular. Es una mala demasiado buena. Me da mucha risa porque llegaron unas fans desde España a visitarme y le dijeron: ‘Usted es muy mala’. Y ella les contestó: ‘Y en la vida real soy peor’. Ella fue mi primera productora, la primera oportunidad que me dieron en novelas fue con ella, en Cañaveral de pasiones . Ella me descubrió de alguna manera. Para mí es un privilegio, un lujo. Es muy simpática, nos reímos demasiado en el set . La verdad fue una gran sorpresa trabajar con Christian, le tenemos mucho respeto. Te impone tanto que te da nervios, pero es encantadora.
¿Cómo equilibra su trabajo de ser actriz y madre en los momentos en que debe demandarle tiempo a las grabaciones?
Es muy difícil. Lo que más me costó en esta telenovela fue tener que dejar a mis hijos por momentos. Ahora que les dije que venía de viaje a Costa Rica me reclamaron: ‘¿Pero por qué te vas de nuevo?’. Hace mes y medio que terminé la novela.
Dice el diseñador Daniel Espinosa que usted es ‘mamá gallina’...
(Risas) Sí, soy súper protectora. Amo el arte y amo ser mamá. Esta novela, cuando me contaron la historia, me encantó ese rol, de tener un hijo, que además luego crece y tiene 17 años. Era para mí un reto y decía (toma un respiro) ¿Cómo? Mi hijo tiene 5 años apenas. Fue muy lindo compartir con la gente de la novela. Yo como Gabriela Suárez fue difícil desprenderme de eso para pasar a ser Verónica Dantés, que llegó por una venganza.
Leí que en la vida real usted es un poco patrona, ¿Es Aracely Arámbula la que lleva los pantalones en las relaciones?
¡Claro! Soy muy patrona, eso me gusta (risas). Es complicado porque cuando uno está acostumbrado a mandar, a dirigir, a hacer, llega alguien, te da órdenes y luego dices: ‘Perame tantito’. En mi casa estoy a cargo de mis hijos, mi madre que es maravillosa me ayuda muchísimo, ahorita que estoy de viaje se hizo cargo de los niños, pero sí soy una persona que está encargada de dirigir. Desde que hacía mis shows a cantar estás al tanto de los músicos, de mi representante que es mi hermano Leonardo. Él precisamente me dice que tiene la culpa, que este título de La Patrona me va mejor que ninguno, pero ni modo.
Luego de tanto tiempo de trabajar con Televisa, fue difícil desprenderse de allí para estar exclusiva ahora con el canal Telemundo?
Bueno, sabes que fue una decisión que sí me la pensé dos veces. Ahora estoy muy feliz de trabajar en Telemundo porque ahí es mi nueva casa, me tratan maravillosamente bien, me siento muy valorada, muy contenta y ya voy a firmar con ellos por más telenovelas. No me afecta, yo creo que tengo las puertas abiertas en las dos televisoras pero ahorita por decisión propia quiero estar con Telemundo y con Argos. Es una televisora con muchísima calidad y ya tengo otro proyecto en puerta.
¿Qué proyectos siguen ahora en su carrera? ¿música o novela?
En la novela tenía dos temas, el principal La Patrona soy yo y otro Juntos tú y yo . Me encantó porque a la gente le ha gustado bastante, y sí, vamos con la música ahora. Tengo proyectos con Telemundo para sacar el disco de este melodrama, más otros temas que estamos preparando ahorita y creo que saldrá pronto. Acabo de hablar con la gente de Argos e irá de la mano junto con el otro proyecto. Este año, lo vamos a empezar a grabar, de la mano del disco, más la joyería con Daniel.
Su novio Sebastian Rulli también es actor, ¿cómo les va en esa relación y si es dífícil sobrellevarlo al estar ambos en ese medio?
Fíjate que hemos estado muy bien. Yo estuve muy tranquila porque ha sido un año sabático de prensa, con eso de que en que te podían entrevistar y no, para mí ha sido muy bueno. Me concentré mucho en La Patrona y ya está dando sus frutos internacionalmente. No fue difícil complementarlo. Los dos grabábamos en México y siempre tratamos de vernos el mayor tiempo posible junto con los niños. Ahora nos vamos de viaje la semana que entra los cinco, así que será muy divertido con los tres niños (dos de ella y uno de él).
Le acompaña su papá en este viaje a Costa Rica...
Sí, ha sido espectacular. Sabes qué pasa que son momentos especiales en los que puedo compartir tiempo con mi familia. Me tengo que dividir ahora en mil, debo hacer citas con mi mamá. Hay viajes donde me acompaña, en otros mi papá (que ayer visitó el volcán Poás y vio el cráter despejado). Sebastián me dijo: ‘Disfruta mucho a tu papá por favor’, él lo adora. Son los momentos entrañables de familia. Tenía mucho rato de no salir cuando estaba con la novela. Mi papá dijo: ‘Encantado vamos a Costa Rica’ y preguntaba: ‘¿Qué hay allá para conocer?’ ‘¿Y qué se come allá?’
¿Tendrá tiempo usted de conocer algo en esta fugaz visita?
Pues mira venimos express pero yo sí quiero probar aquí comidas.
La gente la ve como actriz, pero no tanto esa Aracely fuera de los escenarios, ¿cómo es ella?
Soy una persona sensible, soy de signo piscis. Ayer venía viendo una película y estaba emocionada en el avión. Se trataba de niños entonces ya empezaba a extrañar a mis hijos. Pero aquí llegué y me recibieron con unas fotos de mis hijos en el cuarto. La vi y los llamé. Me hicieron una lista de llevarles juguetes (risas), pero está difícil, ya les compraré unos dulces. A mí en un día normal me encanta ir con ellos al cine, nos las ingeniamos para ir.