Sin aspavientos, pero lleno de emociones que provocaron que la piel de sus fanáticos se erizara rápidamente, así fue la presentación de la española Rosana la noche de este miércoles en el teatro Melico Salazar, en San José.
Fiel a su estilo relajado y alegre, Rosana sorprendió a sus seguidores al entrar por la puerta principal del teatro pasando por en medio de la luneta para tener contacto directo con su público antes de subir al escenario. Fue un gesto emotivo.
El primer encuentro musical vino con la interpretación de Llegaremos a tiempo. Detrás de Rosana, la pantalla proyectaba un reloj que contaba en reversa seis minutos y conforme pasaban los segundos la canción se iba tornando con mayor fortaleza, tanto por parte de la española como por el público y el maravilloso solo de su guitarrista.
En escena no fue necesario más que su carisma, su talento y la complicidad de sus músicos para armar un fiestón en la sobriedad del Melico. Parte del repertorio fue muy romántico, en su mayoría hubo canciones de En la memoria de la pie l , su último disco, pero no podían faltar sus canciones más exitosas y el público se lo agradeció.
Ya encaminados en el espectáculo, Rosana se mostró tal cual es:bromista y enérgica. Cuando cantó Sin miedo, la española detuvo la pieza para hacer una petición muy particular a su fanaticada. "Se que hay algunos que vienen por primera vez, pero hay otros que no. Quiero recordarles que está prohibido que les de el Mal de San Vito, así que hay que levantarse a bailar". El deseo fue una orden y se cumplió al pie de la letra. El público se dedicó a corear y a bailar con los brazos arriba los temas Sin miedo, Hoy y Soñaré.
Solo alegría. La noche fue de sorpresas, Rosana mostró que es capaz de reinventarse y de entretener a sus fanáticos no solo con su talento.
Es una artista completa y como tal también reconoce al talento en los otros. Una de las notas agradables de la velada fue cuando invitó a la joven costarricense Fernanda León, a quien conoció el martes, para que cantara su éxito Aquel corazón, mientras ella tocaba la guitarra acompañándola.
Después de esto bajó un poco las revoluciones y en acústico llegó Así son las cosas. Ese fue otro momento bello ya que sus músicos dejaron los instrumentos y con sus voces de frente al público armonizaron la pieza con sus voces emulando la percusión, mientras, Rosana tocaba la guitarra. El concierto fue realmente dinámico e interactivo.
Así paso con Descubriéndote porque puso a todo el teatro a cantar la pieza a dos voces. De nuevo, el deseo se cumplió al pie de la letra. Se notó que Rosana tiene la capacidad de transmitir su magia y encantar a los demás.
Otra de las invitadas del show fue la nacional Made (quien fue la encargada de abrir el concierto). Con la rubia cantó El cielo que me das.
Antes de decir adiós, Rosana hizo otra petición especial. "Los artistas salimos y esperamos pacientes a que nos pidan otra. Por favor cuando me vaya un momento, pidan otra, para volver'. Así fue. " Gracias, les quedó muy bien", dijo cuando regresó sola a escena.
El adiós fue con Si tu no estás, A fuego lento, Contigo y El talismán. Rosana supo divertirse, encantar y enamorar a un público muy fiel que la adoró de principio a fin.
Uno a uno, mientras interpretaba estos éxitos, Rosana paso por cada piso del teatro. Fue un hasta pronto caluroso, una muestra del respeto y del cariño de la compositora hacia su público.