Yaco, un cubano que ha vivido más tiempo en Costa Rica que en la isla caribeña, es reconocido por sus de crítica social con tono ácido y rimas impecables. El oficio de rapero lo aprendió en Cuba, pero él se alegra de que su familia haya emigrado a este país. “Si estuviera allá, ya estaría preso”, dijo en entrevista.
Con su nuevo álbum, Arroz con mango, Yaco espera mostrar otra faceta de su persona y su capacidad de hacer más que rap.
Ese encasillamiento del que se quiere liberar surgió en el 2011, ya instalado en Costa Rica, bajó unas pistas de Internet y grabó un tema en el que narraba las imágenes que veía cada día eneste país. Lo llamó Welcome to Paradise y lo compartió entre algunos amigos.
“Yo no tenía cuenta en Facebook, no tenía canal en YouTube ni nada. Un amigo subió mis canciones y como dos meses después un amigo me dijo ‘¡ Welcome to Paradise ya tiene 300.000 visitas!’ y yo no sabía si eso era bueno o malo”, explicó Yaco en una entrevista.
Seis años después, ve aquel asunto com un momento que catapultó su carrera, pero también uno que lo impulsó en una dirección de la que le ha costado desviarse.
Después de Welcome to Paradise y el video, hizo otros temas críticos como El hueco y El año viejo –un recuento anual de chascos y personajes noticiosos que hizo dos veces más– y así se consolidó voz que criticaba la realidad nacional.
Ahora que lanza su primer álbum formal, Yaco quiere cambiar de rumbo. “Las canciones localistas puede que se hagan virales, puede que peguen , pero ¿qué vas a lograr? Tal vez una gira con pocas fechas alrededor del país, pero nada más allá.
”Quiero dejar de hacer canciones tan localistas y temporales, quiero hacer música que se sostenga con el tiempo. El año viejo del 2016 todavía lo ven unas 200 personas por día, pero luego ya no va a importar. Este disco es un puente para avanzar a otro nivel”, explicó Yaco.
Viral. Welcome to Paradise le dio a Yaco un empujón que hasta ahora entendemos. En el 2011 no teníamos la palabra, pero Yaco fue un fenómeno viral.
“Yo existo gracias a las redes sociales; si no fuera por ellas no existiría Yaco. Yo no canto desde el 2011, sino desde la escuela, pero solo me conocían los compas del barrio.
”¿Qué pasa? Yo hice música y la llevé a la radio y ahí debe seguir en una gaveta. En las redes (Welcome to Paradis) tomó forma, la gente le dio su valor y luego pasó lo que pasó”, detalló el músico. El video de Welcome to Paradise, a la fecha, tiene más de 1.266.000 reproducciones.
La primera llamada que recibió Yaco de alguien interesado en su música fue del locutor Jair Cruz. Lo llevó a VM Latino a Radio Yeah y lo invitó a hacer su primera presentación, en la explanada del Estadio Nacional, antes de un concierto de Aleks Syntek.
De ahí en adelante, Yaco se fue abriendo camino por sí solo, publicando otras canciones de crítica. “ El Año Viejo siempre me da brete en enero y febrero, pero en marzo ya pasó”, señaló.
Yaco nunca ha podido vivir de la música, porque para hacerlo, dice, tendría que dar clases o tocar la música de otros. “Clases no podría dar, soy autodidacta, y no me gusta la idea de hacer covers , prefiero concentrarme en mi trabajo original”, comentó el artista, de 36 años.
La música original, por más viral que sea, no asegura una carrera, dice Yaco. Él trabaja como operador en una central de radios en un horario nocturno, así aprovecha la luz del día para grabar y promocionar su música. Él quiere que su música le genere su principal ingreso, pero subraya que la única forma de lograrlo es buscando espacios fuera de Costa Rica.
“¿Te imaginás que en lugar de escribir Welcome to Paradise hubiera hecho Welcome to Mexico ? ¡Estaría tranquilo con la plata!”, dijo el rapero entre risas.
Alianzas. Cuando no está en un escenario o frente a un micrófono, Yaco tiene un talante sereno. La entrevista se dio en el estudio de Vibras the Music Company, en Guadalupe, en donde grabó su álbum.
Después de la entrevista, los productores Mau Murillo (Maul) y Gabriel López (Gavvo) recordaron por qué desde que fundaron su estudio hace tres años contactaron a Yaco.
“Muy poca gente sabe la calidad de artista que es Yaco. Él compone todo en guitarra y tiene una creatividad impresionante; nadie se lo imagina, pero Yaco es muy minucioso”, explicó Maul.
Antes del equipo de Vibras, Yaco trabajó con el productor Nico Guevara. En el 2012, grabaron temas que fueron presentados en El Chinamo de Teletica e incluso las primeras maquetas para un disco, pero Guevara falleció en mayo del 2013.
“Yo me desaparecí como un año de la música, bajoneado completamente. Nico era como mi hermano y eso fue un golpe al hígado. Cuando murió Jairo Mora, en el 2014, sentí el impulso para volver a grabar algo y lo hice por mi cuenta, me motivé mucho”, confesó Yaco.
En el 2014 el equipo de Vibras lo contactó y grabaron el disco corto Evolucionando . Más adelante trabajaron en nuevas versiones de El hueco y El Año Viejo y el compilado Los cangrejos y algo más , que reúne varios temas sueltos. En el 2016, empezó el trabajo del nuevo álbum.
Nuevo. Arroz con mango , lanzado el 12 de junio en plataformas digitales, tiene diez temas en los que Yaco muestra la versatilidad que el título sugiere.
El primer tema, Karma, tiene ritmo de reggae, mientras que los temas que cierran el álbum La princesa y El amor es así, una balada y una canción de ritmo dancehall, respectivamente.
A toda esta variedad Yaco le hace frente con un verbo seguro, rapeando e incluso cantando.
“Por más comercial que sea la canción me gusta que las letras tengan un sentido, que no haya facilismo y creo que las diez canciones de este disco reflejan eso.”, explicó Yaco.
Temas como Canción indígena y Ella y ella tratan temas de corte social, por ejemplo, pero ambas exploran sonidos que Yaco no había tanteado antes. La idea, es que este sea un álbum que pueda ser tocado en vivo por una banda “para mí ese sonido orgánico en tarima es fundamental”, comentó Yaco.
Más allá de hablar de lo que ocurre a su alrededor, Yaco habla de sí mismo, es decir, de Yatsel Domínguez, el hombre y el ciudadano.
En Lo mío –canción en la que lo acompaña Perrozompopo–, dice tener “un oficio que no llena la alcancía, pero vale el sacrificio por las alegrías”. En La princesa, cuenta su experiencia como padre primerizo y en El tiempo, habla de la ansiedad de tener mucho trabajo en frente para proveer a la familia.
Ahora, quienes piensen en Yaco tendrán nuevas referencias más allá de sus críticas. Pero él no quiere que nadie lo encasille, sino que, sus seguidores esperen cualquier cosa de su música.
“He hablado mucho de esto con Maul, este disco será mi puente para que vean que no solo hago rap”, dijo Yaco. “La gente me va a conocer y después de este álbum, voy a hacer, musicalmente ,lo que me da la gana”.