Un tenor de origen campesino llevó la ópera a La Carpio

Música inclusiva El cantante David Fonseca compartió su experiencia y esperanza con alumnos de escuela de música de La Carpio

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Empezó a cantar y La Carpio quedó en silencio...

La donna è mobile

qual piuma al vento

muta d'accento

E di pensiero...

Las caras del público revelaban una mezcla de alegría, asombro y entusiasmo.

E' sempre misero

chi a lei s'affida,

chi a le confida,

mal cauto il core...

Hasta los niños más inquietos quedaron congelados como si la voz del tenor los hubiese hechizado.

La donna è mobile

qual piuma al vento,

muta d'accento

e di pensier.

Concluye la música y, por un instante, el tiempo se paraliza hasta que una avalancha de aplausos acribilla al cantante.

Sucedió ayer por la tarde en La Carpio. La estrella del concierto fue el tenor David Fonseca , costarricense oriundo de Poás de Alajuela y de origen campesino, que canta y estudia en Europa, pero regresó a su terruño para compartir el arte y motivar el desarrollo social.

“Realmente, creo la música transforma el mundo, por eso estoy aquí”, dice el tenor de 25 años, quien descubrió su talento cuando tenía 19 años, cantando karaoke con sus hermanos y primos.

Fonseca ha estudiado en el Conservatorio de Música de Bruselas y comenzará en setiembre a perfeccionar su técnica en el Palau de les Arts en España, tras ser seleccionado por Plácido Domingo.

Acción social. El concierto fue organizado por el Sistema Integral de Formación Artística para la Inclusión Social ( Sifais ), una escuela de música que desde hace dos años funciona en La Carpio y la cual se financia con donaciones y voluntariado.

La empresa Eureka es la promotora de la iniciativa.

En el sitio se le enseña a tocar una serie de instrumentos a personas de todas edades, desde chiquitos de cinco años hasta madres de familia que superan los 40.

El telonero de Fonseca fue la Orquesta Sinfónica de La Carpio, la cual interpretó tres piezas, entre ella la popular El viejo Macdonald .

Andrey Montero es su director. Se trata de un muchacho de 18 años, estudiante de Música de la Universidad de Costa Rica. La labor la hace como voluntario, como una forma de retribuir a la sociedad, dice, pues su acercamiento al arte fue gracias al Sistema Nacional de Educación Musical (Sinem) de Pavas, programa del Ministerio de Cultura y Juventud, que es similar al Sifais.

“Trato de que trabajen en equipo, que disfruten la música, que se interesen y la vean como una forma de ser más felices” explicó.

Por su parte, la Orquesta de Guitarra de La Carpio interpretó Hoy te doy la mitad de lo que soy, de Abracadabra.

El público, conformado en su mayoría por habitantes de La Carpio, se mostró fascinado con toda la actividad. Daniel Fonseca regresará la próxima semana a Europa; sin embargo, el martes dará un concierto en el Teatro Espressivo en Curridabat.