Ante las declaraciones dadas en Costa Rica por Karlos Alvarado con respecto a la supuesta suspensión del concierto de Motörhead anunciado para hoy, 6 de abril, Paulo Barón, director de la promotora Top Link Music, dio esta semana su versión a Viva.
Barón, director de Top Link Music, fue calificado por el productor local como supuesto responsable de que Motörhead recibiera información no certera, especialmente, sobre el último de los tres lugares a donde fue traslado el concierto: el Club Pepper’s, en Curridabat.
El productor local aseveró a Viva: “Si Motörhead no viene es porque no quiere”.
Barón, quien estaba en Inglaterra para el momento en que en Costa Rica se hicieron públicas las apreciaciones de los responsables de este concierto aquí, respondió el pasado lunes las consultas hechas el viernes anterior por este diario.
“El concierto de Motörhead en San José, Costa Rica, fue cancelado debido a diversos problemas que se produjeron por parte de la producción local del espectáculo, Craneo Metal”, dijo Barón.
Paulo Barón enumeró tres razones principales que sirvieron para fundamentar tal decisión.
“Primer problema: se cambió la sede Anexo del (estadio Ricardo) Saprissa ya que no estaba a salvo, y había un hospital cercano”, explicó el empresario.
“Segundo problema: El promotor local no podía vender alcohol en la segunda sede, el redondel de Zapote, lugar que fue sugerido por él mismo. A partir del cambio de este nuevo espacio se creó confusión e inseguridad para la banda”.
“Tercer problema: Fuimos informados de que iba a haber otro cambio, a un lugar más pequeño llamado Club Pepper’s. La banda pidió todos los requisitos técnicos de la nueva sede y la producción tomó más de dos semanas (en responder). La banda, por medio de su mánager, les advirtió que el espectáculo no sería confirmado hasta que no se hubieran cumplido con todos los requisitos técnicos”, dijo Barón.
Oportunidades. De acuerdo a la versión de Paulo Barón, a la productora local le dieron otras opciones para resolver.
“Se le dieron varias opciones al promotor, tratando de que el concierto se diera de la mejor manera posible. Una opción era traer equipo de otro país, (que el promotor debe tener, y no tiene), o cambiar la fecha del espectáculo, porque así iban a tener tiempo para reunir todo el equipo. Pero ellos explicaron que eso les traería costos adicionales”, explicó Barón.
“Dimos la opción de devolver el show al redondel de Zapote, que fue el segundo lugar. El promotor no aceptó ninguna de las opciones”, explicó Paulo Barón.
“Ningún sistema de sonido ni mesa de sonido que propuso la promotora eran apropiadas con respecto a lo que pedía la banda. La banda y nosotros, como booking (enlace de negociación) hicimos todo lo posible por el show. El 25 de marzo se dio un ultimátum de 24 horas para que la producción local confirmara, algo que tampoco se ha realizado”, concluyó Barón.