Taylor Hawkins, el baterista de Foo Fighters que dijo adiós con ‘Somebody to Love’

El músico falleció este viernes 25 de marzo en Bogotá, Colombia. Las causas de la muerte no están claras, pero deja detrás de sí una estela de grandes conciertos y una gran amistad con Dave Grohl

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Somebody to Love de Queen, fue el último tema que el baterista Taylor Hawkins, de Foo Fighters, cantó en un escenario. El músico acostumbraba dejar la batería por un momento durante los conciertos con su banda para tomar el micrófono y saltar al frente de la tarima con el fin de interpretar algún éxito de su grupo favorito: Queen. Así lo hizo ocho días antes de su inesperada muerte, cuando en el festival Lollapalooza, en Argentina, emuló a Freddie Mercury. Fue la última vez que Hawkins tocó y cantó.

Exactamente una semana después, el viernes 25 de marzo, una noticia fatal sacudió al mundo de la música (no solo al rock, sino a todos los géneros): Hawkins fue encontrado muerto en la habitación del hotel Casa Medina, de la cadena Four Seasons, en Bogotá, Colombia. El baterista había fallecido apenas unas horas antes de subir a escena con Foo Fighters en el festival Estéreo Picnic donde tocarían a las 11 p. m.

Pronto colegas y fans del baterista y de la agrupación liderada por Dave Grohl mostraron sus sentimientos de dolor y angustia por la inesperada partida del artista. Con mensajes de homenaje y tributos en redes sociales, el mundo recordó la trayectoria y pasión por la música de Hawkins, quien perdió la vida a los 50 años.

Pasión inspirada por Queen

Taylor Hawkins nació en Forth Worth, Texas, el 17 de febrero de 1972.

Su camino en la música comenzó por el empuje de su hermano, quien le enseñó primero a tocar la guitarra. Sin embargo, se enamoró de la batería inspirado por Roger Taylor de Queen y Stewart Copeland, de The Police. Cuando Taylor tenía 10 años se sentó detrás de un equipo “desvencijado y ruidoso” por primera vez en el garaje de su vecino. “Y entonces”, dijo, “mi vida se convirtió en batería, batería y más batería”, recordó el medio BBC.

De acuerdo con El País de España, Hawkins siempre recordó en sus entrevistas que su madre fue su principal soporte durante sus primeros años en la música. “Ella siempre me animó a que me dedicara a la música y me compró la primera batería”, había dicho el artista.

Pero en cuestiones musicales, la mayor influencia que tuvo Hawkins la recibió de Queen, cuando en 1982 fue a un concierto de los británicos. “Después del recital no pude dormir en tres días. Ese concierto fue el principio de mi obsesión por el rock and roll”, contó en un una revista inglesa, afirmó El País.

Su preparación musical la completó en California, en un conservatorio. Allí también aprendió a tocar el piano y la guitarra.

Alanis y Foo Fighters

Hawkins fue reconocido internacionalmente cuando se unió a Alanis Morissette como músico de la banda de la gira para promocionar el disco Jagged Little Pill, en 1995. Pero su punto máximo llegó cuando se unió a Foo Fighters (banda que formó Dave Grohl luego de la muerte de Kurt Cobain y el término de Nirvana) tras la salida de William Goldsmith en 1997.

Grohl contó en su autobiografía que Hawkins estaba muy intimidado por formar parte de la banda, pero que inmediatamente entre ellos se dio una “especie de amor a primera vista”, recordó BBC.

“Desde el primer encuentro, nuestro vínculo fue inmediato y nos hicimos más cercanos cada día, con cada canción, con cada nota que tocamos juntos”, escribió el también baterista. “Estamos absolutamente destinados a serlo y estoy agradecido de habernos encontrado en esta vida”, agregó.

“Estaba un poco nervioso al principio, pero lo superé. Nadie puede tocar mejor que Dave Grohl. Simplemente, tiene una visión en su cabeza”, había comentado Hawkins en una entrevista.

Desde ese momento ambos artistas formaron una mancuerna que día a día y tras tarimas y estudios de grabación se fue haciendo cada vez más sólida.

Cuando Foo Fighters se convirtió en el éxito que llenaba estadios con sus conciertos, la figura de Hawkins salía a relucir en escena. Durante los espectáculos solía dejar la batería para que Grohl se sentara en ella y así cambiar papeles: el baterista cantaba clásicos del rock como Under Pressure, Rock n’ roll y Somebody to Love.

“Podía pulverizar el kit (de batería) en The Pretender, tocarla como una canción en Learn To Fly o agregar un toque funky a una pista como Shame Shame. Era más que el equivalente de Grohl, era su cómplice. La estrella del rock dijo una vez que Hawkins estaba ‘demasiado calificado’ para su banda”, así describió el periodista de música Mark Savage al baterista en el medio BBC.

“Hombre carismático de melena rubia, filosofía vital californiana y estilo exuberante, era el tipo de batería que tocaba como si boxeara”, publicó El Mundo de España en una breve biografía del artista.

Abusos

El uso de estupefacientes por parte de Taylor Hawkins fue un tema público. El baterista había hablado en varias entrevistas sobre su consumo de drogas y además de la sobredosis de heroína que padeció en el 2001, cuando tenía 29 años, y que le provocó estar dos semanas en estado de coma.

Sobre ese suceso, Hawkins se expresó abiertamente en una charla con el medio Kerrang! “Solía consumir muchas jodidas drogas... Creía en el mito de mierda de vivir rápido y morir joven”, dijo en esa conversación que se publicó en febrero del 2021.

“Cada uno tiene su propio camino y el mío lo llevé demasiado lejos. Estaba de fiesta en Londres una noche, y por error hice algo y cambió todo. No estoy aquí para predicar sobre no consumir drogas, porque me encantaba hacerlo, pero me descontrolé por un tiempo y casi me termina atrapando”, explicó

El músico agregó: “Me dirigía por un camino que conducía a caminos aún peores. Ya sea que alguien esté sobrio, o le guste una copa de vino con la cena, o quiera una botella de Jägermeister antes de subir al escenario, o le guste fumar marihuana todo el día, todos tienen su propio camino, y el mío fue demasiado lejos”.

Sobre el tema de las drogas, Hawkins afirmó que estaba contento por haberse “golpeado la cabeza” en ese momento, pero que no se arrepentía de nada de lo que había pasado en su vida porque todo era “parte del viaje”.

Después de que el músico se recuperara, su amigo Dave Grohl confesó que escribió para él el tema On The Mend que se publicó Foo Fighters en el disco In Your Honor (2005).

“No sé si Taylor lo sepa, pero en el disco acústico hay una canción que es para él llamada On the Mend. La escribí cuando él estaba en coma por sobredosis. Es sobre Taylor, nunca le he dicho que es para él. Es una canción de amor que habla sobre un amigo moribundo. La puse en el disco y pensé que se daría cuenta, pero jamás hemos llegado hablar del tema. Tampoco quiero hablar de eso”, dijo Grohl en un documental.