Superación evidente

Novedoso. El programa incluyó estrenos de obras iberoamericanas.

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Fue grato constatar la superación experimentada por la Orquesta Sinfónica Municipal de Cartago (OSMC), según la evidencia del rendimiento que alcanzó, bajo su director titular, maestro Iván Arguedas, en el concierto de inauguración de las presentaciones en San José de la temporada 2012 del conjunto, llevado a cabo, la mañana del domingo 11, en el teatro Eugene O’Neill.

Obras y solistas. Piezas de compositores iberoamericanos formaron el programa, entre ellas, el estreno centroamericano de la Fantasía concertante para contrabajo y orquesta, del argentino Salvador Amato (1928-1994), con la participación notable en el instrumento solo del uruguayo Milton Masciadri, en su tercera visita al país.

Asimismo, incluyó el estreno internacional del Concierto en la menor para piano y orquesta, del destacado compositor, pedagogo y pianista colombiano Luis Carlos Figueroa (n. 1923), en una lectura elocuente del solista nacional Manuel Matarrita.

La Suite latinoamericana para cuerdas, del tico Vinicio Meza (n. 1968), abrió la función, y la finalizó el conocido Danzón N° 2, del mexicano Arturo Márquez (n. 1950).

Interpretaciones. Los dos movimientos breves de la Fantasía concertante exhiben una modesta factura tradicional pero permiten el lucimiento del contrabajista, para provecho del maestro Masciadri, quien hizo cantar el instrumento, del que obtuvo tonos plenos y pulidos.

En 1986, Luis Carlos Figueroa compuso y estrenó como solista el Concierto en la menor para festejar el 450 aniversario de la fundación de la ciudad de Cali, en cuyo conservatorio era profesor.

Estructurada en los tres tiempos usuales, la obra se mantiene dentro de los cánones de la tonalidad, muestra instrumentación sagaz, atractivo colorido armónico y una escritura idiomática para el piano. También denota la influencia de ritmos típicos, como el bambuco y el pasillo, y se sirve de escalas empleadas en la música indígena colombiana.

Manuel Matarrita forjó una interpretación fulgente, ágil en digitación, precisa en ritmo, el fraseo conexo y fluido.

En ambas obras, Iván Arguedas y la OSMC se mantuvieron empatados con los solistas y, en particular, acompañaron a Matarrita de modo exacto y desenvuelto.

Con ingenio y sensibilidad, la Suite de Meza recorre cuatro ritmos emblemáticos de nuestro continente: el tango argentino, el vals venezolano, el chôro brasileño y el son cubano.

Al comienzo de la Suite oí las cuerdas algo tímidas, pero pronto cobraron ánimo y brindaron ejecuciones decididas y puntuales, el sonido terso y afinado.

Para finalizar, Iván Arguedas y la Orquesta Sinfónica Municipal de Cartago se despidieron y arrancaron aplausos prolongados del público con una versión enérgica y radiante del Danzón de Márquez, distinguida por intervenciones sobresalientes de metales, maderas y percusión.