En su brazo izquierdo, cerca de la muñeca, tiene tatuado una V rodeada de dos alas. Esa letra tiene un significado muy importante en la vida del cantante colombiano Santiago Cruz: su hija se llama Victoria y le recuerda a Draco Rosa, quien es uno de sus artistas predilectos.
Además, la V en números romanos significa cinco, que es la cantidad de discos que ha sacado Cruz durante su carrera.
De hecho, como parte de la promoción de su quinto álbum de estudio ( Equilibrio , 2014), es que el colombiano visita el país para ofrecer su primer concierto frente a los costarricenses.
El show será este miércoles, a las 9 p. m., en el Jazz Café Escazú. La entrada costará ¢20.000.
Acá un extracto de la conversación que mantuvo con Viva .
Este es su tercer disco consecutivo en el que el productor Nacho Mañó (Alejandro Sanz, Playa Limbo y Armando Manzanero) mete mano. ¿Qué le gusta de trabajar con él?
Trabajamos cada canción de forma particular. La gran virtud de Nacho, entre tantas que tiene en el campo de la producción, es que tiene un respeto férreo por la esencia de la pieza. Todo lo que se toca está pensado y sentido para acompañar a la letra de la canción. Parece una obviedad, pero no es así porque los productores de pronto opacan las canciones.
”Y, por más que este disco se haya hecho en el mismo estudio en el que se hicieron los otros dos, es una experiencia distinta. Además, Equilibrio se grabó como se grababa antes: todos los músicos tocando al mismo tiempo en el estudio; eso le da una calentura que yo creo que se siente en el disco”.
¿Fue difícil ese proceso de grabación?
Tuvimos la inmensa fortuna de tener a músicos de calidad mundial tremenda. Son músicos que ya han pasado por todas las guerras en la música y que trabajan alejados del ego y en pro de la canción.
En total, grabó 28 canciones, de las cuales solo fueron incluidas la mitad. ¿Cómo es el proceso de selección?
Las que no se incluyen están por ahí guardadas, aunque hay algunas que no quedaron por una razón justificada; no fueron afortunadas. Las que sí me gustaron, pero que no incluí, verán la luz en mi voz o en otras voces.
”Cada vez logro tomar más distancia de las canciones en el proceso de selección. Lo que hago es apagar el ego del autor, que es un enemigo tremendo que todos tenemos, y escuchar opiniones de gente que intenta ser objetiva”.
En todos sus discos incluye, al menos, una colaboración. En este, hay tres, de las cuales llama la atención la que hace con la nueva artista cubana Diana Fuentes. ¿Cómo llegó a ella?
Para mí, Diana me está entregando ese maravilloso talento que tiene para darle gloria a una canción ( Lo que Dios quiera ). Escribo boleros eventualmente por influencia de mi madre. En este disco, me animé y quería que fuera un dueto.
”La disquera me la presentó y me enamoré de su trabajo. Es una cubana cantando un bolero y eso pocas veces sale mal”.
Este es un álbum con gran presencia de guitarras eléctricas; es más pop rock . ¿Por qué el cambio?
Fue resultado de una necesidad que tenía de emparentar lo que hacíamos en vivo con los discos. Es el primer trabajo de los cinco que refleja lo que hacemos en vivo también. Nosotros, a pesar de la intimidad que siempre proponemos, saturamos el show de ímpetu. En resumen, lo que quisimos en este disco era que el personaje del estudio y el del escenario se encontraran en un mismo concepto.
Hay mucha influencia de la etapa como padre que vive; un ejemplo es Luz violeta , tema que le dedica a su hija.
Sí, yo escribo como consecuencia de lo que me pasa en la vida. Es imposible que la paternidad te pase de lado y no lo cuentes. La primera vez que escuchamos el corazoncito de mi hija en una ecografía, fue como: ‘Uy, qué impresión’. Se te abre un universo maravilloso y la escribí.
”Todas las ecografías yo las grababa. Después de una en particular –en donde le oímos el corazón, la veíamos y sabíamos que era una niña–, llegué a la casa, puse los videos y me inspiré. Tenía que contarlo de alguna manera.
¿Por qué le puso al disco Equilibrio ? ¿Anda en busca de ello o ya lo encontró?
Lo busco permanentemente. Sé que es difícil de encontrar y aún más difícil de mantener. La búsqueda genera una recompensa maravillosa, que es este álbum.
La edición especial de este álbum es un vinilo. ¿Por qué así?
El año anterior, el único rubro de música física que aumentó sus ventas fue el vinilo. Aumentó de venir de nada a venderse un poco. Eso ayudó, pero lo que me hizo tomar la decisión es que vengo de una familia de melómanos, en donde el tocadiscos era una parte fundamental en cualquier relación social.
”Cuando era niño y pensaba en esto de hacer música, la representación física de ese sueño era un vinilo. Es muy significativo que un disco mío sea así”.
Para celebrar el lanzamiento, se hizo un tatuaje en su brazo izquierdo que deja leer una V con alas. ¿Por qué?
Siempre me ha gustado eso de conmemorar episodios importantes de mi vida con tinta. Llevo 17 tatuajes y, cuando llegó el disco, pensé en cómo pintármelo. Se me ocurrió esto porque encierra muchas cosas: mi hija (que se llama Victoria), el quinto disco de mi carrera y mi admiración por Draco Rosa.
¿Cómo será este primer concierto en el país?
Tendremos una formación acústica. La primera vez en cualquier lugar siempre es emocionante. Es un terreno nuevo y tiene ese picante e incertidumbre.
También, por primera vez, compartirá escenario con Perrozompopo y Bernardo Quesada...
A los dos los conocí en México y estoy muy contento de estar con ellos. Son grandes artistas.