Palmares se despidió a un ritmo conocido: con actos repetidos

Conciertos durante Fiestas de Palmares apuestan por reiterar artistas de ediciones pasadas o actos que ya han visitado el país

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Todo lugar tiene su sonido particular. En San José suenan la salsa y bachatas de los negocios; en las playas nunca falta el reggae ; en los bares universitarios de San Pedro suena rock en español y reggaetón y en Palmares, todas las anteriores.

Esta es música con fin: el baile, la socialización. Sin la música la dinámica en todos estos campos sería otra, o quizás no existiría.

El concierto de cierre de Palmares se ha transformado en un documento de qué escuchan los costarricenses del Valle Central cuando van de fiesta, teniendo de por medio a uno que otro “artista del momento”.

Repetitivo. Una mirada a la lista de actos en vivo que ha sido parte de esos conciertos de cierre sugiere que las propuestas orbitan en los ritmos mencionados y están en riesgo de repetirse hasta el hartazgo de sus asistentes.

Esto se nota en la reiteración de artistas: nombres como Los Rabanes, Los Auténticos Decadentes, Calle 13 y Los Pericos han estado al menos dos veces en Palmares desde el 2009.

De la misma manera, actos como Sean Paul, Fonseca y Don Omar han sido invitados a Palmares después de probarse su éxito en otras presentaciones.

La oferta nace de la demanda, claro, y la gente quiere bailar. Los ritmos de rock, reggae, cumbia y reggaetón son constantes entre los actos ofrecidos y eso no está mal; es, como se dijo, lo que la gente oye en otros ambientes de fiesta.

La crítica pertinente es que se prima a los viejos conocidos. Rara vez organizadores y patrocinadores se arriesgan a invitar a un artista nuevo (el invitado más novel ha sido el reggaetonero Farruko, que visitó el país el año pasado).

Quizá esto no merma la asistencia, pero estando en el área de conciertos, es claro que la audiencia tampoco se está volviendo más joven.

Una oferta más variada y con actos nuevos podría colocar los festejos alajuelenses como un evento más atractivo.

Lo de siempre. El domingo pasado, el concierto internacional de la Fiestas de Palmares convocó a los grupos argentinos Los Auténticos Decadentes y Los Pericos y al grupo tico Los Ajenos.

El concierto fue una extensión de la música que normalmente suena en estas fiestas y las interpretaciones igual de irreverentes que el público, que no dejó que ningún cantante se acercara a la pasarela sin salir bañado en cerveza.

Además de las canciones que ya habían tocado en otros conciertos, durante las participaciones de los grupos argentinos se repitieron los mismos cuadros: los bailes de ska que empiezan lentos pero que luego van dando pie a altercados entre los asistentes (lo mismo pasó en 2011 con Los Calzones Rotos y Calle 13).

El alcohol puede jugar un papel importante en esto, pero lo lógico es que la misma fórmula llevará a lo mismo una y otra vez.

La redundancia es tan lamentable como aprovechada para proponer conciertos masivos que convocan, se organizan bien, pero que ya no se esfuerzan por sorprender.

En broma, pero muy en serio, un amigo armó hace unos años una playlist que se llamaba “En Palmares también se rockea ”.

Era una colección de canciones de Maná, Enanitos Verdes, Héroes del Silencio, Auténticos Decadentes, Hombres G, Los Fabulosos Cadillacs, Los Rabanes, música que acompañó las animaciones del concierto del domingo en Palmares y seguramente el anterior a ese, y el anterior a ese también, y el anterior,...

Palmares, como todos los lugares, tiene su sonido; pero ya está en riesgo de sonar a disco rayado.