Músico tico vuelve a escena en México y se presenta frente a 4.000 personas luego del parón por la pandemia

El bajista Luigi Jiménez, quien toca con los mexicanos de Camilo Séptimo, se encuentra de gira con la banda por el país azteca y contó sus experiencias en los conciertos de la nueva normalidad.

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“Mientras estaba en ese concierto, en el Foro Sol de la Ciudad de México y frente a 4.000 personas, me costaba entender lo que estaba sucediendo. Después de estar tanto tiempos encerrados y de vivir protocolos tan estrictos; volver a sentir una tarima y estar frente a una audiencia eufórica, no lo podía creer. Ha sido algo surreal”.

Así describió el músico costarricense Luigi Jiménez una de las experiencias que ha vivido en México, donde recientemente realiza una gira de conciertos con la agrupación Camilo Séptimo. El reencuentro de Jiménez con el público y los conciertos masivos lo llenan de esperanza en tiempos en los que la pandemia por el nuevo coronavirus ha azotado fuertemente a la industria de la música y el entretenimiento en el mundo.

Sobre su experiencia en esta gira de espectáculos, el también bajista de la banda tica Patterns habló con Viva ampliamente.

De acuerdo con el músico, tanto Camilo Séptimo como otras agrupaciones como Los Ángeles Azules, los venezolanos de Los Amigos Invisibles y la solista Yuridia; ya han estado girando por México con recitales masivos, los cuales se realizan bajo estrictos protocolos de salud para evitar la propagación del virus.

La gira de Camilo Séptimo empezó el 19 de junio. Hasta el momento se han presentado en escenarios de Puebla, Guadalajara, Ciudad de México y San Luis Potosí. Luego, la banda tocará en Querétaro, Toluca, Morelia, Pachuca y Monterrey.

“Dentro de la industria mexicana Camilo Séptimo es una banda de rock pop alternativo de las más grandes, esto permite que a nivel de inversión funcione un espectáculo, porque es rentable para la producción. Se sabe que la gente va a llegar”, explicó Jiménez vía telefónica desde México.

Eso sí, no todos los conciertos que ha protagonizado la banda han sido con aforos tan grandes como el que sucedió en el Foro Sol, algunos venues donde han tocado han albergado audiencias de 300 o 400 personas, dependiendo de la capacidad de los lugares.

El artista comentó que algunos de los protocolos que se aplican en cada presentación es realizar la prueba covid-19, tanto para los músicos como para todo el equipo de la producción del show. Además, los asistentes tienen que utilizar mascarillas durante todo el tiempo que dure el espectáculo.

En el caso del Foro Sol, uno de los venues más grandes de México, se habilitaron espacios tipo cubículos para que el público asistiera en burbuja a ver el show. Cada espacio estuvo dispuesto para que fuera ocupado por grupos de cuatro a ocho personas, contó.

“Estoy muy impresionado por la respuesta del público. En el caso del Foro Sol había una tarima de dimensiones impresionantes para la banda y el evento se vendió en su totalidad. La gente está muy emocionada por empezar una nueva etapa en temas de conciertos y espectáculos artísticos. La pandemia no se puede dejar de lado, pero sí se puede aprender a convivir con ella”, expresó el artista.

Jiménez agregó que la reactivación de la industria del entretenimiento en México es un gran paso para que los trabajadores vuelvan a retomar sus actividades y así generar ganancias. “No solo es la banda, son los técnicos, el personal del venue, los que montan las tarimas... son cientos de personas que al final de cuentas viven de la industria. Tomando las medidas correspondientes se puede reactivar”.

El artista es consciente de que la inversión para llevar a cabo este tipo de eventos es alta y, por lo tanto, las entradas también suben de precio; pero reconoce que, al menos en México, el público ha respondido de manera muy positiva.

“Es como una desesperación y una gran euforia la que tiene la audiencia de volver a ir a conciertos. Realmente la gente tiene hambre por vivir estas experiencias. La recepción ha sido increíble, aunque debo decir que como artista es extraño no poder tener un contacto más directo con el público porque después del show ya no se pueden hacer encuentros con los fans o firmar autógrafos”, contó.

Jiménez ha trabajado con Camilo Séptimo desde que la banda grabó Óleos, su disco debut en el 2017. El músico y su colega el tico Mario Miranda (Patterns) fueron los productores del álbum.

Después de esa experiencia, la banda invitó a Jiménez a tocar con ellos en el prestigioso Festival Vive Latino. La relación de Jiménez con Camilo Séptimo se ha extendido durante estos años, tanto que el bajista vivió en suelo mexicano durante algún tiempo para ser parte de la agrupación.

La situación en Costa Rica

Gracias a su experiencia, Jiménez asegura que en Costa Rica no solo es necesario, sino totalmente viable, empezar a realizar actividades artísticas de gran formato. Eso sí, destaca que es necesario que exista apoyo por parte del público, de empresas privadas y del Gobierno para patrocinar y promover los montajes.

Jiménez también es productor de eventos, por eso sabe de lo que habla. De hecho, es una de las cabezas detrás del Festival Envision que año con año realiza un encuentro de músicos y público durante varios días en Uvita, Puntarenas.

“Se necesita no solo decir, sino profesionalizar. Toda esta nueva realidad de la industria necesita capacitaciones reales sobre cómo llevar los protocolos, sobre cómo llevar a cabo un evento de gran magnitud con los cuidados respectivos. Con capacitación y profesionalismo de todas las personas involucradas en la industria, es totalmente viable llevar a cabo un evento masivo en Costa Rica”, aseveró.

“Para que sea rentable en Costa Rica, primero que todo hay que saber que hay que pagar un poco más por la entrada. Es necesario saber que es al artista nacional -no al internacional- al que nos debería importar ver en vivo. Pero, ¿cómo hacemos para que ese artista nacional tenga la suficiente convocatoria para hacer el concierto?”, reflexionó.

Aquí es donde entra el apoyo de la empresa privada y también de las autoridades de Gobierno encargadas de la cultura, para que un evento de música nacional reciba el espaldarazo necesario.

“Como seres humanos, es claro que tenemos una gran necesidad por llenar nuestra parte cultural y artística, tanto como creadores como espectadores”, finalizó un reflexivo Jiménez.