Música electrónica unió almas y rompió estereotipos en el 7DK

Más de 8.000 personas se dieron cita este sábado en una actividad que convocó a destacados DJ de la escena local y extranjera

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¿En cuál hospital naciste?, preguntaba uno de los encargados de seguridad a un joven que, a simple vista, no podía pasar de los 15 años. En un tono casi imperceptible, el chiquillo que se encontraba en las puertas del Centro Kölbi, en Parque Viva, prefirió entregarle su cédula de identidad y “demostrarle” que sí era mayor de edad.

Sin embargo, ante la incredulidad del agente y del público que, ordenadamente ingresaba al recinto, todo parecía indicar que la cédula era real y que este “adolescente” en crecimiento, tendría entrada libre a participar en el Festival 7DK de Kölbi.

Este joven, cuya identidad no trascendió, quería unirse a las más de 8.000 personas que asistieron a la fiesta electrónica que se realizó este sábado, y que convocó a reconocidos DJ de la escena local y extranjera.

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Desde la entrada, el público vivía una experiencia hecha para todos los sentidos. Luces de neón, tatuajes, coronas de flores, brazaletes y lentes titilantes, además de las camisetas oficiales del festival, formaban parte de la regla, y no de la excepción, de la actividad.

Cuando se abrieron las puertas, alrededor de las 3 p. m., los asistentes ingresaban al centro y podían deambular a sus anchas por el espacio en el que, además de la tarima principal, podían tener acceso al área de juegos, donde la fila más larga era para ingresar a la Tagada; también había acondicionado un espacio para tomarse la respectiva fotografía oficial.

En medio de tantos jóvenes, que impregnaban de su ilimitada energía el lugar, resaltaba una pareja que halló en uno de los costados de una tarima, el mejor refugio para descansar mientras comenzaba la fiesta electrónica.

Luis Arias, quien con una sonrisa de orgullo confesó que tenía 54 años, y su esposa, Gineth Azofeifa, explicaron que venían desde Limón para acompañar a sus dos hijos, Jurgen y Justin Arias, quienes son fieles amantes de esta música.

“Ya estamos acostumbrados a este tipo de conciertos. Desde que mis hijos se montan en el carro, lo primero que hacen es poner música electrónica. Hasta que uno se baja al ritmo de lo que está sonando”, explicó Arias.

Explicó que Jurgen, el mayor de sus hijos y quien es estudiante de Medicina, le pidió que como regalo de graduación le pagara un viaje a algún festival de música electrónica en Brasil o Europa.

“A pesar de que no somos amantes de esta música, nos gusta compartir este tiempo con nuestros hijos, ver cómo cumplen sus sueños de ver a sus artistas favoritos”, afirmó.

Estos padres “todo terreno”, confesaron no sentirse ajenos a lo que deparaba la noche del sábado, pues lo que allí disfrutaría el público, era su diario vivir junto a sus dos hijos.

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Trabajo

Unos metros más adelante, se encontraba un grupo de amigos que destacaba por el “uniforme” escogido para el Festival 7DK.

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María José y Ariel Calderón, junto a Alison Navarro y Alejandro Mendoza, dejaron de lado la camiseta oficial de la actividad para darle paso a su propia creación: una camisa con logos y nombres de los DJ del line up oficial.

“Me tomó más de un mes diseñar la camisa. Fue un poco complicado hacer que cada elemento coincidiera, pero lo bueno de esto es que nos queda de recuerdo. Tengo del festival pasado y del Life in Color, así que es una especie de colección”, explicó Alison, quien es estudiante de Enfermería y que confesó no saber nada sobre el diseño.

Por su parte, Leonardo González, de 19 años, también decidió crear su propia versión de una camiseta en la que resaltaban los nombres de Nervo y Galantis, dos de los dúos más esperados de la noche, además de la bandera de Costa Rica.

“Estar aquí es un sueño cumplido para mí. Desde hace varios años sigo la música de Nervo y Galantis y nunca pensé verlos aquí en Costa Rica. Hoy será una noche inolvidable”, dijo.

Con el fondo musical de los suecos Galantis; las australianas Nervo; los canadienses Young Bombs; el español Luis López, y los mezcladores ticos Ale Mora, Maxx y John, Disto y Mex, el Festival 7DK demostró ser una fiesta en la que no existen estereotipos y que, en mayor o medida, todos somos de los mismos.