Madonna expone su esencia

El nuevo material de la reina del pop sale hoy a las calles; mientras algunos la dan por acabada, ella regresa a la música bailable para demostrar por qué es tan difícil de vencer

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Confesiones y música bailable parecen ser una fórmula exitosa para Madonna, que hoy lanza oficialmente su producción llamada MDNA.

Este disco pone fin a una sequía musical de cuatro años, la más larga de una carrera que llegará a las tres décadas a finales de este año.

Además, también marca su regreso a la música bailable después de haber experimentado con ritmos más urbanos en su anterior producción Hard Candy (2008).

Esta decisión ha sido celebrada por sus fans. No obstante, la elección de Give Me All Your Luvin’ como primer sencillo ha generado algunas dudas, pese a haberse convertido en la canción número 44 de su carrera en llegar al top 10 de Billboard.

Para alivio de muchos, este tema no es representativo de lo que está hecho MDNA que, además, está lleno de letras personales, algo poco habitual en su trayectoria.

Tal es el caso de I Don’t Give A, en el que Madonna sorprende al hablar de su divorcio con Guy Ritchie y relatar lo que vivió en esos años.

Los primeros cuatro temas fueron construidos para ser un éxito en los clubes, ahí en la pista de baile, donde ha acumulado algunas de sus mayores glorias.

Así es como Gang Bang, una de las favoritas de los fans de la rubia intérprete, remonta a la época de Erotica, pero con un tratamiento actual que explora el dubstep.

Se rumora que esta canción sería el próximo sencillo promocional y que Madonna quiere a Quentin Tarantino como director de lo que sería el video musical.

El disco también sirve como una especie de autohomenaje a la carrera de Madonna, gracias a la incorporación de algunos elementos que, a través de los años, la han llevado a la cima del pop.

Por ejemplo, el primer corte abre con una confesión y parte de la cual se traslada a la época del disco Like a Prayer (1989), en la canción Act of Contrition.

De igual forma, Madonna volvió a reclutar al productor inglés William Orbit, responsable de redireccionar su sonido con el exitoso Ray of Light (1998). Aparte de él, también colaboró en esta ocasión con nombres como Benny Benassi y Martin Solveig, entre otras reconocidas figuras.

En la coautoría de uno de los temas, contó con la participación del cantante Mika, así como de su cuñado Joe Henry, quien ya había le había escrito el tema Don’t Tell Me, del disco Music.

Nueva batalla. Durante los cuatro años de ausencia, Madonna se dedicó a otros proyectos, dentro de los que destaca su filme W.E., mientras tanto, toda una serie de jóvenes estrellas han luchado por dejarse su puesto.

Es así como hay quienes la dan por acabada desde años atrás y le adjudican su trono del pop a otras figuras como Lady Gaga, Britney Spears o Rihanna; ella misma se encarga de acabar con las especulaciones.

“Solo hay una reina y esa es Madonna”, dice Nicki Minaj en el final de I Don’t Give A, uno de los temas más personales de este disco.

A los 53 años, y con más de 200 millones de copias vendidas en todo el mundo, la estrella pop no tiene nada que probar y es de suponer que no le interesaría entrar en este tipo de comparaciones.

Sin embargo, hay un nuevo disco que vender y si hay alguien que sabe de controversias y cómo obtener el mejor provecho de ellas, esa es Madonna.

Su nuevo video, para el actual sencillo Girl Gone Wild ha desatado una polémica que, como es de esperarse, no parece ser casual.

El videoclip ha sido comparado con el de Alejandro, de Lady Gaga, en especial por presentar a hombres en tacones altos como se veía en el de Gaga, publicado en el 2010.

Como resultado, Madonna tiene a un ejército de más de 20 millones de pequeños monstruos, como Lady Gaga llama a sus fans, hablando de su nuevo trabajo y, sin querer, mostrándoselo al mundo.

Es uno de esos típicos casos que se inspiró en la frase célebre del escritor inglés Oscar Wilde: “Que hablen de uno es espantoso. Pero hay algo peor: que no hablen”.

El título del disco también ha generado controversia, ya que es muy parecido a MDMA, el activo químico que se utiliza para fabricar el éxtasis y, de hecho, le ha generado críticas, entre otros, del Dj y productor Deadmau5, por promover el consumo de drogas en los jóvenes.

El médico Drew Pinsky, conocido como el Dr. Drew, y quien es reconocido por sus tratamientos a celebridades que buscan desintoxicarse se sumó ayer a la polémica.

El experto publicó un video en el que alerta sobre un nuevo producto altamente adictivo y que llegaba al mercado. Por supuesto, que hablaba del disco MDNA. Era promoción, más promoción.