Kinky regresa con música para el corazón

Gil Cerezo habló sobre el proceso de grabación del sexto disco del grupo mexicano, el cual retoma el mensaje político de las primeras entregas.

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Hace 17 años cinco jóvenes de Monterrey se juntaron en un garaje. Todos venían de bandas rock; sin embargo la música que brotó de ese cochera tenía tintes distintos, era más electrónica, más experimental, más único.

La banda mexicana Kinky, compuesta por Ulises Lozano Gil Cerezo, Carlos Chairez, Omar Góngora y César Pliego, estrenó en julio su sexto disco de estudio Nada vale más que tú, el cual combina el estilo de publicaciones previas.

A pesar de ser una banda que se reproclama orgullosamente mexicana, los sonidos de Kinky remiten a varios estilos alrededor del mundo. Por esta razón es que la música del quinteto azteca se ha utilizado en comerciales de Smirnoff e incluso en videojuegos como Little Big Planet , estrenado para la consola PlayStation 3. Viva conversó con el cantante Gilberto Gil Cerezo, quien hizo un repaso por la trayectoria y la construcción de una banda de nicho.

¿Cómo realizaron esta producción después de tanto tiempo sin grabar?

La última vez que lanzamos un disco fue en el 2012 cuando publicamos el disco S ueños de la máquina , pero después tuvimos un MTV Unplugged (un recorrido acústico por varios temas de la banda) que si no es un disco de temas inéditos pues sí requiere de cierta preparación. Después de lanzar este disco en DVD posteriormente hicimos una serie de giras con el formato unplugged , las cuales mantuvieron al grupo ocupado porque estuvimos un año y medio en eso.

¿Cuánto tiempo les tomó realizar este nuevo álbum?

Estuvimos en un periodo de dos años pero sin dejar de hacer tours , sino que cuando regresamos a Los Ángeles, que es donde tenemos el estudio,| nos adentramos en la parte de composición y de producción, pues en todo lo que fue el diseño de este álbum peloteamos 45 ideas, de las cuales elegimos diez que son las que sobresalieron y ahora forman parte del disco Nada vale más que tú.

Este disco lo produjimos nosotros en su totalidad, lo que también fue una parte muy cómoda del proyecto, pues el desarrollo fue muy natural, toda la parte creativa no se sintió tan restringida o apretada por algún productor| entonces todo fue muy orgánico. Todo el proceso de sonidos, pues también fuimos nosotros los que estuvimos moviendo las perillas y diseñando cada uno de los sintetizadores, sonidos y guitarras que aparecen en el disco.

A ustedes se les recuerda en Costa Rica por éxitos como Soun Tha Mi Primer Amor y Ejercicio #16 ¿Cómo ha cambiado la banda desde su primer disco lanzado en el 2002?

Como banda tenemos 17 años de componer y 15 años de estar publicando. Ha sido un largo recorrido en el que ha habido de todo, incluso musicalmente hemos experimentado hacia un lugar y hacia otro, que desde el principio era casi pura electrónica, después del segundo fue un poco más roquero, el tercero ya es una comunicación entre los dos entonces si ha sido como un taller de experimentación. Siempre bajo la espina dorsal de la electrónica pero el sonido de Kinky ha variado mucho.

¿Cómo condensan esa experiencia musical en este último disco?

Hemos coqueteado con muchos ritmos, incluso con muchos personajes y artistas con los que hemos colaborado que expanden el sonido de la banda, entonces me atrevo a decir que esta jornada de 15 años ha sido pues una montaña rusa en cuanto a la exploración del sonido y la música. Ahora llega esta etapa con este último disco que se llama nada Vale más que tú en el que creo que se conjuga toda la carrera y tiene como un sentimiento hacia ese primer disco en el que todo lo que traíamos de bagaje lo colocamos en un solo disco. Pareciera que es la conjugación de todos los discos anteriores, es un producto muy coherente que suena mucho a nosotros y que tiene mucho coqueteo con ritmos actuales como el trap o los ritmos urbanos, incluso algunas puntas de reggaeton. Todo esto se conjuga para volver a formar este disco experimental pero dócil, fácil de consumir.

¿Cómo cambió el proceso de grabación en comparación a sus primeros días?

Este es un disco que se asemeja mucho a la grabación del primero. Aunque parezca extraño, en nuestro primer disco utilizamos muchos estudios, estuvimos grabando en Londres, Monterrey y Ciudad de México. La banda en ese entonces no tenía un nombre o el peso, por así decirlo, la infraestructura de un estudio propio; sin embargo en ese entonces tuvimos la facilidad de tener aliados con disqueras y grupos que nos permitieron plasmar lo que teníamos en mente en aquel entonces, pues el disco de hoy es un disco totalmente hecho en casa, obviamente esta casa ya tiene los aparatos que alguna vez necesitamos, también tenemos un arsenal de sintetizadores. La industria de la grabación ha cambiado muchísimo y la calidad que podemos llegar a tener con una computadora portátil pues es superior a lo que plasmamos en el aquel entonces.

Suena que antes tenían más comodidades

Aunque sonara más ostentoso el primer disco por los viajes, los diferentes ingenieros, este disco tiene el lujo de que podemos hacerlo en un estudio propio que tenemos, también ese otro lujo que es el tiempo, que nos permite como ideas y creaciones para plasmar lo que queremos.

Kinky se ha caracterizado por ser un crisol de sonidos y estilos ¿Qué fue lo que tuvo que pasar para se formara la banda?

Fue por el rock (se ríe). Nos formamos como cualquier otra banda de garage empezamos Carlos (guitarrista) Ulises (tecladista) y yo como en una especie de taller donde por primera vez teníamos a un lado las guitarras y la batería. Todos veníamos de bandas de rock y por primera vez empezamos a experimentar con softwares, computadoras y sintetizadores así que empezó como un proyecto algo más experimental en dónde hacíamos sesiones en vivo, era como una especie de jam (música libre) dónde la electrónica era la base, después entró César el bajista y por el baterista Omar todo ocurrió en un proceso de tres o cuatro meses. Entonces la banda creció en su totalidad, somos los mismos integrantes hasta el día de hoy.

La banda empezó a crecer tocando en vivo y nuestros conciertos eran más grandes hasta que logramos convencer a las disqueras de que nos apoyaran con el disco.

En su nuevo disco hay temas que recurren a la política ¿Cuál es la posición de Kinky con respecto a la políticas migratorias de Donald Trump y cómo estas influenciaron su disco?

Como todos los latinos que estamos por acá en Los Ángeles, estamos totalmente en contra . Creo que la visión del mundo también va enfocada a todo lo contrario a lo que es la segregación social. En este disco tratamos de recuperar el lenguaje político sobre todo en la primera canción que se llama Un peso , este es el principal tema del disco. Tratamos de plantear la premisa de que los más valioso de todo nuestro alrededor, ya sea del contexto político o del contexto artístico, la drogas o Donald Trump, ante todas esta coyuntura lo más importante es el ser humano; de ahí nace la frase: Nada vale más que tú.

Más allá de la música usted también sobresale por sus trabajos en pintura ¿podríamos esperar en un futuro un proyecto como solista?

Por ahora no, la mayor parte del tiempo se lo dedico a la banda, pues resultar ser un proyecto polifacético. En esta ocasión tuve la oportunidad de diseñar junto a un equipo de animadores y cineastas la puesta en escena del escenario que usamos en los conciertos. Esto es lo bueno de este proyecto, que me permite explorar muchas de mis inquietudes como artista.