Después de publicar varios mensajes controversiales en las redes sociales –en los que alaba a su cuestionado presidente Donald Trump– Kanye West decidió aislarse por un tiempo.
“Para cualquiera que haya intentado ponerse en contacto conmigo a través de llamadas o mensajes de texto durante las dos últimas semanas, tengo que decir que me he deshecho del teléfono para centrarme en todos estos discos”, escribió el marido de Kim Kardashian en su cuenta de Twitter para pedir a sus amigos y personas cercanas que no lo molesten mientras se encuentra en un intenso proceso creativo.
El astro de la música se está preparando para lanzar un nuevo trabajo discográfico y, además, se encuentra trabajando en una colección paralela de canciones junto a Kid Cudi, también cantante de hip hop.
De acuerdo con la revista People, West se fue a un valle resguardado por las Montañas Rocosas, llamado Jackson Hole, Wyoming, en Estados Unidos, el 2 de mayo para poder enfocarse en su nueva propuesta musical.
Esto tras haber tenido una serie de semanas complicadas o que se podrían catalogar como explosivas, en la palestra pública, agregó el medio.
Como por ejemplo, haber sido vetado el pasado jueves del programa de radio The Bounce, de Detroit. “Se acabó. No queremos oír a Kanye, no queremos ponerlo en nuestro programa, no queremos hablar más de él”, dijo el presentador de The Bounce durante un Facebook Live.
“Nos negamos a poner nuestra plataforma a su disposición”, agregó.
Esto luego de que el cantante opinara en su cuenta de Twitter que: “Cuando oyes hablar de los 400 años de esclavitud… ¿400 años? Suena más a una elección”.
Además de The Bounce, otra emisora de radio de Nueva York se unió al rechazo tuiteando: “El boicot a Kanye ha comenzado”.