¡Hamburguesas Ilimitadas!

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En tiempos en los que la comida rápida se propaga casi como una ideología revolucionaria, cuesta encontrar hamburguesas que no desconfiguren la nutrición y opciones en las que el cliente pueda crear su comida favorita a su gusto y antojo.

Si se mira desde una perspectiva sencilla, la hamburguesa normal aporta a la dieta proteínas, hidratos de carbono, azúcar y grasas, dependiendo del tamaño y la cantidad de tortas en la hamburguesa.

Este tipo de comidas nació gracias a la necesidad de algunos antepasados de caminar y comer al mismo tiempo, y a la vez tener una dieta balanceada.

Hoy, las hamburguesas son mal vistas, pero eso no quiere decir que todas sean necesariamente dañinas; si se cuida la selección de ingredientes y la cantidad de carne, una hamburguesa puede ser una comida sumamente nutritiva y sana.

Sin embargo, actualmente, la proliferación de restaurantes de comida rápida hace de esta afirmación un reto difícil.

Que existen lugares en los que las hamburguesas son más sanas que en otros, los existen, así como hay muchos restaurantes y sodas que venden sus propias hamburguesas extravagantes, con una cantidad exagerada de ingredientes y variedad.

Entre tanta bulla y publicidad, uno de los lugares que cuidan a la perfección el concepto original de la hamburguesa es Big 8, en donde actúan ingredientes ricos, naturales y frescos, creando productos comestibles que no son pesados ni al estómago ni a la billetera.

Ubicado en Plaza Anonos, en Escazú, justamente al lado de una estampida de lugares de comida rápida, Big 8 tiene su cocina abierta y visible al público, para que nadie se tenga que comer una colección de ingredientes de dudosa procedencia y/o trayectoria.

Ahí, la carne no es congelada; está fresca y no es procesada. Las papas fritas son naturales y se cortan en la cara del cliente. Los vegetales son los más frescos que el mercado ofrece y el pan es de diseño artesanal y auténtico.

Los tamaños de las hamburguesas de Big 8 son un poco más racionales y normales que los de la fotografía adjunta; normalmente venden hamburguesa sencilla, doble y triple; sin embargo, se le puede agregar la cantidad de tortas adicionales que el cliente desee, por tan solo ¢500 adicionales.

También destacan establecimientos como la soda Pepinos, en Barva de Heredia, lugar en el que se hace la hamburguesa Miedo y Doble Miedo, que incluye una buena porción de papas en el centro.

En Los Almendros, en Tibás, venden la hamburguesa Tres Tortas, que claramente representa una exquisita y adictiva sobredosis de carne. Tal hamburguesa ha sido considerada anteriormente como una de las tres más grandes que se venden en el país.

En las cercanías, La Poblanita ofrece la hamburguesa Misteriosa, que aparte del mismo número de tortas, incluye tocineta y huevo frito. Sí, huevo frito en medio de la hamburguesa, acompañado de queso y jamón. ¡Es un manjar que contiene toda la comida que se necesita en el transcurso del día.

En Bobby’s Burgers, en Santo Domingo de Heredia, no se hacen hamburguesas tan descomunales, pero la mezcla de ingredientes como tocineta, guacamole, distintos quesos y deliciosas salsas hacen del lugar uno de visita obligatoria para los expertos en el tema.

Extendemos la invitación para disfrutar de las hamburguesas que diferentes sodas y restaurantes familiares ofrecen a lo largo del país, y los invitamos a compartirnos sus recomendaciones, porque nunca está de más una suculenta y deliciosa hamburguesa.