“El tango será el protagonista en nuestros shows . Ahí, la gente que asista verá una gran mezcla entre el tango y la música clásica. Serán espectáculos que no han visto antes y que les desarrollará el gusto por estos géneros”.
Con esas palabras, John Mery, guitarrista chileno del dúo Weiss-Mery, adelantó lo que se podrá presenciar durante los conciertos que darán en el país, como parte del Festival de Música Credomatic.
Las citas con este dúo –conformado por Mery y la flautista estadounidense Dawn Weiss– están pactadas para el sábado 10 de agosto en el hotel Villa Caletas, en Jacó (Puntarenas); el domingo 11, en el hotel Tirol, en Heredia, y el jueves 15 en la Reserva Conchal (Guanacaste).
Según contó Mery en una conversación que mantuvo con Viva el Tiempo Libre , la mayoría del repertorio que se escucharán serán piezas del fallecido Astor Piazzolla, compositor argentino de tango.
“Le tenemos un gran respeto a este artista y, en lo personal, me gusta muchísimo su música. De hecho, durante el show vamos a tocar un arreglo que hice del tema Adiós Nonino (obra que refleja una emocionada despedida por la muerte de su padre). Además, interpretaremos Historia del tango ”, mencionó.
Él agregó: “Tocaremos también temas de los compositores Mario Castelnuovo-Tedesco y Kent Kennan”.
Los diferentes espectáculos se prevén que duren cerca de una hora. “Un tiempo bien aprovechado y en el que nos vamos a disfrutar al ritmo de buna música”.
Carreras por aparte. Antes de hacer el grupo en el 2007, la flautista Weiss ya era reconocida en su natal Estados Unidos y otros países del mundo, como Bolivia, Italia México y Perú.
Ella, quien empezó en este mundo artístico a los 9 años, fue la flauta principal de la Sinfónica de Oregon y de la Orquesta Sinfónica del Estado de México.
“Estoy muy enamorada de mi carrera. Dedicarme a esto ha hecho que me sacrifique en muchas cosas, pero no me arrepiento”, comentó la flautista, de 62 años.
Por su parte, Mery, quien tiene 43 años, contó que, cuando era niño, pensaba en dedicarse a tocar rock .
“Era muy joven y eso era lo que me gustaba; pero, cuando escuché la música clásica, me gustó más. Te explico: interpretar piezas clásicas es más difícil que subirse a un escenario y tocar rock . Hay más técnica y, definitivamente, hay que esforzarse más”, concluyó.