Doce horas llenas de una pura emoción musical

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¡Sí hay profetas en su propia tierra! En Costa Rica podemos asegurar que el talento criollo se apoya y que la música, más allá de géneros y de estilos, llega al corazón de los fieles seguidores.

El festival de música Suena CR, organizado por la marca Claro, ayer sábado en el marco del Transitarte 2015 lo confirmó. Fueron 12 horas llenas de notas musicales salidas de la mano de artistas ticos.

En la mañana, el turno fue para Mumble Riot, Pappin y los Perrobots y República Fortuna, que le ofrecieron a sus fans buenas dosis de orgullo transformados en canciones.

A eso de la 1 p. m., la dulzura de las voces de las chicas de Passiflora contagiaron a los presentes. Con una presentación impecable, lograron inyectar su gypsy folk tanto hasta que el público se tiró a pista emulando los movimientos gitanos que inspiraban las notas.

Con un repaso por su N oches en vela , se escucharon éxitos como Laugh So Hard , Montaña , Like a Tree y Moonlight .

El festival se convirtió en un menú especial para el público, porque en la lista de artistas había rock, gypsy folk, reggae y rock psicodélico.

Recién llegados de una gira por Argentina, los de Un Rojo hicieron lo que les dio la gana sobre el escenario a eso de las 2 p. m. Con las voces de Jaguar, Kumary Sawyers y María Luisa Castro, el reggae se volvió el rey.

Un Rojo no podía dejar pasar por alto su mensaje social y gracias a las letras de sus canciones pidieron paz, espacios para que los niños jueguen y cambios en las leyes.

Con piezas de su disco En la calle y una pincelada de lo que trae Reborn , su tercer álbum; los músicos ofrecieron una presentación eufórica y llena de energía.

El público era en su mayoría adolescentes y adultos jóvenes- no paró de bailar, gritar y saltar.

Así lo hizo Nicole Hernández, de 15 años, que desde que llegó a la 1 p. m. al concierto no se quedó quieta ni un momento.

“Me voy hasta que termine, de aquí no me muevo. Aprovecho el último bus que sale para Heredia, pero no me voy sin verlo todo”, aseguró acompañada por un grupo de amigas de la misma edad.

Los cartagineses de Florian Droids dieron una cuota de rock psicodélico. El cuarteto le dio un momento de paz al ambiente

El dance pop de Patterns volvió a activar las revoluciones. Es claro que Estefani Brolo, su nueva vocalista, lo ha hecho bien y tiene una sinergia envidiable con sus compañeros. La banda aprovechó para cantarles su último sencillo We Can Be The Fire .

Reencuentro. El que cuatro amigos no tocaran y cantaran juntos desde hace ocho años ha sido una mala noticia para los seguidores de Kadeho; anoche en el parque Nacional el escenario fue la perfecta excusa para volver.

Jorge Zumbado, mejor conocido como Mechas, Roberto y Juan Carlos Brenes y Mario Miranda retomaron a Kadeho y le dieron a sus fans lo que hace tanto tiempo estaban esperando: buen rock.

Como es su costumbre no defraudaron, aunque según Mechas la preparación fue apenas una cosa de dos ensayos juntos, pero lo que bien se hace, no se olvida tan pronto. Según Zumbado, podrían volver con sorpresas.

“Nos vamos a meter al estudio a grabar a ver qué sale. Pero queremos que sea algo bien pensado y con mucho compromiso porque la música así lo demanda”, dijo.

Psicotropical. ¿Qué se puede decir del cierre de un día de derroche de orgullo nacional?

Pues mucho, si se habla de Sonámbulo.

Ya eran pasadas las 8 p. m, la gente llevaba más de 10 horas de pie y la fusión de jazz, rock, cumbia y hasta bolero, los inyectó de pies a cabeza.

La zapateada, infaltable en los chivos de Sonámbulo, levantó más restos de ceniza, pero no importó.

Los éxitos de estos artistas que recién estrenaron su Psicosonorama no dejaron que nadie estuviera en paz.

Cada una de las piezas como La maraca, Jabalí Montuno o Afroparc e, encendió esa chispa especial en cada persona, hasta hubo espacio para hacer un reconocimiento al chiqui-chiqui de los 80 con un mosaico de lo mejor de la cumbia del recuerdo.

El baile estuvo protagonizado por Ligia Torijano y Walter Cupido Morales quienes dieron cátedra de swing criollo.

Fue el cierre perfecto para un día lleno de emociones al límite, un día que se marcará como hito para los artistas nacionales.