La migración y la riqueza de la cultura nicaragüense fueron los ejes centrales del Festival Nicaragua Presente, actividad organizada por el Centro Cultural de España (CCECR) y que se realizó ayer en el parque La Merced, en San José.
El evento inició pocos minutos después de las 10 a. m. con la obra de teatro Mirando al Norte, de José Álvarez (Grupo Contraluz). Peatones, vendedores ambulantes y demás personas que se encontraban en los alrededores del parque se acercaron con curiosidad para ver de qué se trataba la actividad.
Con la ayuda de micrófonos inalámbricos, una escenografía sencilla, música y efectos de sonido, los actores José Fernando Álvarez, Rodrigo Alvarado, Erick Córdoba, Pablo Morales y las actrices, María Chaves y Pilar Solano, compitieron con las palomas, el humo y el viento, hasta consolidar un pequeño pero fiel grupo de espectadores.
Alrededor de 300 personas se quedaron para conocer la historia de Ernesto González, un inmigrante que sale de su país de origen en busca de mejores oportunidades para él y su familia.
Dispuesto a hacer cualquier cosa por acceder a un trabajo, Ernesto cae en manos de un grupo de coyotes que se aprovechan de su desesperación para maltratarlo y sacarle dinero.
Hacia el final de la puesta en escena, un fuerte aguacero espantó a gran parte del público, que buscó refugio bajo sombrillas, árboles y edificios cercanos. Solo los más entusiastas permanecían ahí.
A las 11:45 a. m., el cantautor nicaragüense Juan Solórzano asumió la tarima con su banda conformada por Edwin Rayo García, José Ángel Jerez García, Erwin Leonel Rayo García, Christopher Adán y Arauz Álvarez.
“El Señor sabrá porque mandó la lluvia, tal vez para refrescarnos el alma y el espíritu esta mañana. Venimos con toda la alegría para hacer un concierto con lo mejor de nuestra música y recordar de dónde venimos”, dijo Solórzano, antes de pedir que levantaran la mano quienes provenían de Masaya y Managua, entre otros lugares.
Mientras una sábana de agua caía sobre la capital, la banda interpretó las primeras piezas y, cuando finalmente escampó, algunos asistentes se animaron a convertir la plaza en una pista de baile y bailaron al ritmo de canciones típicas.
Cultura.La celebración del Festival Nicaragua Presente constituyó el cierre del ciclo Inmigrart que que el CCECR inició hace tres años. A pesar de coincidir con un contexto de relaciones convulsas entre Costa Rica y Nicaragua, no tiene un mensaje político, explicó a Viva la coordinadora general, Yorleny Alpízar.
“Nuestro trabajo está limitado al reconocimiento de los derechos de las culturas de todas la poblaciones. Sí creemos que es una posibilidad para dar a conocer el aporte que hacen los nicaragüenses a la diversidad cultural de Costa Rica”, recalcó Alpízar.
“También estamos trabajando en la descentralización de la acción cultural y por eso nos trasladamos al parque La Merced, sabiendo que es dónde se concentra, generalmente, la población migrante nicaragüense”, agregó.