Coros, actores y hasta animales de granja recibieron el mes diciembre

El Teatro Nacional dio comienzo a su temporada de fin de año, con la inauguración de su portal, una posada y el inicio de la Jornada Coral Navideña

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Cuatro coros, músicos, actores, un burro y cinco ovejas sorprendieron a decenas de capitalinos la noche de este miércoles, durante el comienzo de la temporada navideña que organiza el Teatro Nacional.

La actividad comenzó con una posada en la que participaron actores y cantantes de la Pastoral Juvenil de San Joaquín de Flores, cinco ovejas y un burro de la granja de don Elián Bolaños, también vecino del cantón herediano.

Estos animales sirvieron para acompañar a los artistas y recrear un pesebre en vivo.

La caravana navideña partió del Museo del Banco Central, pasó por el Hotel Costa Rica y concluyó en el Teatro Nacional, donde artistas y animales realizaron una recreación del Nacimiento de Jesús, la cual sirvió para inaugurar el portal de la institución.

A lo largo del camino, el llamativo desfile sorprendió a las cientos de personas que transitaban por la avenida central, al final de la tarde.

Pese a la lluvia que caía en ese momento sobre el Valle Central, más de una persona no resistió la tentación de saber qué era lo que pasaba y de inmediato se incorporaron al desfile.

“¿Estarán repartiendo las letras de las canciones? Yo quiero cantar con ellos”, preguntó una de las espectadoras a otro, y pronto se fue a buscar a uno de los organizadores.

Luego de la presentación del Pasito, el Teatro Nacional habilitó un pequeño toldo donde se repartió agua dulce y repostería gratis a todos los que llegaron a la fiesta.

Una vez que las gargantas de los asistentes se calentaron con las bebidas, dio comienzo la Jornada Coral Navideña, la cual fue inaugurada por el Coro Renacimiento Escuela de Artes Musicales, de la Universidad de Costa Rica.

En plena plaza de la Cultura, y bajo un toldo blanco, los artistas, vestidos totalmente de negro, interpretaron al público temas navideños como En Belén tocan a fuego y No despierten al niño.

El talento de los cantantes hizo que los compradores se salieran de las tiendas y que en los restaurantes las mesas que daban hacia el escenario fueran las más cotizadas.

Para muchos, la música navideña fue el mejor remedio para combatir las bajas temperaturas, e incluso, un maravilloso pretexto para abrazar a sus parejas con fuerza. Pese a esto, el viento y la llovizna le jugaron una mala pasada a los organizadores, pues el audio falló en varias ocasiones.

Pese a todo, el público fue bastante leal a la actividad y siempre se mantuvo pendiente a lo que sucedía en el escenario, por encima de los problemas técnicos.

Más voces. Luego del canto de los universitarios, le toco la oportunidad a Voces de la Vieja Metrópoli, un grupo compuesto por jóvenes y adultos mayores.

Vestidos con gabardinas de color rojo, los cantantes animaron al público con temas populares de la música navideña como Peces en el río y Blanca Navidad.

Como parte de su espectáculo, los artistas interpretaron otras canciones como Que niño es este, Alegría por doquiera, Gozo del mundo es el Señor y Navidad en el campo, entre otras.

La agrupación que cerró el concierto fue el Grupo Musical Experimental Universitario UCR, que interpretó un repertorio de obras latinoamericanas.

Este coro no se limitó al talento de las voces de sus cantantes, sino que acompañó su participación con instrumentos de cuerdas y de percusión, que le dieron más sabor a cada canción.

Como parte de su show, interpretaron temas como Velo que bonito y una mezcla que fusionó las canciones Es el hijo de Dios y Los tres reyes magos, de la costarricense Brunilda de Portilla.

El final de la presentación llegó con María soñé que tu niño, Festejo la Navidad y Candombe de San Baltazar, que le puso punto final a la primera noche de diciembre.

La Jornada Coral Navideña tendrá dos noches más de actividades en la plaza de la Cultura. Recuerde que los conciertos son gratis.