Es la tercera temporada oficial que la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN) tiene al maestro Carl St. Clair al frente, como director titular. Durante este 2016, St. Clair se presentará con el ensamble en seis de los 12 conciertos, iniciando este viernes 4 en el Teatro Nacional , con la inauguración de temporada a las 8:00 p. m.
¿Qué puede revelar este primer concierto sobre lo que será el resto de la temporada?
Es nuestra primera reunión con la familia de la OSN del año. Siempre hay mucha emoción al regresar al Teatro con la Orquesta Nacional. Quería darle la bienvenida al público, nuestra familia, con un muy edificante, feliz y disfrutable agradecimiento por volver.
¿A qué se debe la selección del repertorio?
La obertura El murciélago de Johann Strauss tiene melodías hermosas y todo tipo de pasajes increíblemente virtuosos para la orquesta; sentará el estado de ánimo ideal: positivo, optimista y muy ‘estamos felices de verlos’ tipo de ánimo.
”Después, iremos a la más famosa ópera de Richard Strauss, El caballero de la rosa . Será una hermosa combinación de ópera y opereta. Es una muy buena manera de que la orquesta dé la bienvenida. Mi maestro era un gran fanático de Strauss, por lo que para mí no es solo buena música, sino que es volver a mis raíces musicales.
”Tras el intermedio, haremos este increíblemente importante concierto de Rajmáninov que es mucho más largo que los otros dos. Es increíblemente impresionante y apasionante, tiene toda la belleza melancólica que cultivaremos desde el respeto hacia un gran romántico pianista”.
¿De qué manera reta a los músicos este concierto?
Reta a la Orquesta en muchísimos aspectos. Es la primera vez que terminamos con un concierto; normalmente lo terminamos con la Orquesta, pero con este particular concierto no hay casi nada que yo conozca que lo pueda seguir. Es tan apasionante y poderoso que por el bien del público, después de Rajmáninov, tendrán que tomarse algún trago o champaña. No hay mucho más que se pueda hacer musicalmente.
¿Qué aspectos de los músicos van a realzarse con el repertorio?
El rango de expresión musical es muy amplio: desde el gozo, la felicidad y lo edificante de la obertura, el abrumante romanticismo de Rajmáninov, hasta la dinámica sensibilidad de El caballero de la rosa . Tiene mucho contraste dinámico y un gran espectro de contraste emocional. Otro gran reto es acompañar a un gran artista en un una gran pieza, como lo es Alexander Romanovsky.
¿Qué valor le agregará un artista como el pianista Romanovsky a este concierto inaugural?
Alexander ha tocado esta pieza desde que es joven. Es un concierto que no todos pueden tocar, es así de difícil. No cualquiera intenta tocarlo y no todos los que intentan tocarlo pueden hacerlo. Él es un máster de este concierto y lo ha tocado muchísimas veces. Es algo que parece muy natural para él; simplemente fluye. Está hablando desde el corazón, no está tocando una pieza técnicamente difícil, sino que le cuenta al público sobre lo que la música está diciendo.
¿Qué puede esperar con esta inauguración de temporada?
Nada además de disfrute, belleza, afecto y una mano extendida de la OSN para decir: ‘bienvenidos, gracias por volver y gracias por ser parte de nuestra familia’.
Funciones: viernes 4 a las 8:00 p. m. y domingo 6 a las 10:30 a. m. Precio: de ¢4.000 a ¢18.000. Se aplicará un 50% de descuento a estudiantes y ciudadanos de oro.