Mucho se habló sobre que Archie y Lilibet, los hijos del príncipe Enrique y Meghan Markle, no tuvieran los títulos de príncipe y princesa; sin embargo, con la muerte de la reina Isabel II y el cambio en la línea de sucesión del trono, los pequeños automáticamente se convirtieron en príncipes y Altezas Reales.
Así lo han informado medios internacionales como la revista Hola! y también The Guardian. Los medios explicaron que al fallecer la reina se aplica la orden que estableció el rey Jorge V en 1917, en la que dice que “los hijos de cualquier soberano y los hijos de los hijos del soberano (nietos) tendrán en todo momento y disfrutarán del título de Alteza Real, con el título de príncipe o princesa antes de sus respectivos nombres de pila o sus títulos honoríficos”.
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Cuando los duques de Sussex dieron una explosiva entrevista con la comunicadora Oprah Winfrey, se tocó el delicado tema de los títulos reales. En ese momento, Meghan dijo que mientras estaba embarazada de su hijo se le informó que no se le daría un título y que tampoco disfrutaría de la seguridad que se le da a los príncipes por parte de la casa real.
Los duques temían que cuando Carlos asumiera la corona cambiara el decreto de Jorge V, ya que supuestamente se había insinuado que quería una monarquía reducida.
Si llegaran a utilizar sus títulos reales y nada cambia, los niños serán reconocidos como Su Alteza Real el príncipe Archie de Sussex, mientras que Lilibet será Su Alteza Real la princesa Lilibet de Sussex.