El actor escocés Sean Connery y su esposa figuran como imputados en un caso de lavado de dinero en un complejo de condominios de lujo, ubicado en Marbella, ciudad turística de España.
El juzgado investiga la venta de la finca Casa Malibú, que había sido propiedad del actor escocés, quien la adquirió en la década de los setenta y, posteriormente, la vendió. Después de eso se construyeron dichos condominios, publica hoy en su edición digital el diario español ‘El País’.
El matrimonio tendrá que declarar en los próximos días, junto a cinco abogados más que también están involucrados en el caso.
El caso, que se encuentra bajo secreto sumarial, incluye además del actor y su esposa y los abogados a una veintena de personas que también han declarado por esa misma causa.