Quinceañera Rubí Ibarra: 'Mi casa en el rancho es un escape de lo que vivo'

Las cámaras, el próximo lanzamiento de su sencillo musical e incluso posibilidades de actuar son parte de lo que rodea la vida de la adolescente. Ella conversó con Viva acerca del cambio que experimenta tras volverse una figura viral

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Cumplir 15 años en Latinoamérica siempre ha sido un acontecimiento magno.

En Costa Rica, por ejemplo por allá de los años 50 uno de los máximos presentes que recibían las quinceañeras de alta sociedad era aparecer en el periódico. Por muchos años La Nación se llenó de las más hermosas señoritas que celebrarían por lo alto su cumpleaños.

Los tiempos cambian, pero las tradiciones no. Aunque hoy muchas niñas prefieren ropa, un viaje o dinero efectivo para celebrar sus 15 primaveras, hay otras que anhelan su fiesta, su celebración pomposa; ese fue el caso de la quinceañera mexicana Rubí.

Como toda una familia tradicional ella y sus padres, don Crescencio Ibarra y doña Ana Elda García invitaron a sus amigos y familiares más cercanos, pero acorde con los tiempos, se valieron de la tecnología para participar a sus allegados.

El video en el que extendían la invitación a la fiesta de su hija menor se viralizó al punto que en Facebook poco más de 1.300.000 de usuarios “confirmaron asistencia” a la fiesta de la niña vecina de La Joya, una comunidad en el Estado de San Luis Potosí en el que hay cerca de 200 habitantes.

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Sentada en su habitación, pensando en qué hacer con sus amigas de preparatoria. Así estaba Rubí Ibarra hace un año, antes de volverse una figura mediática. Hace menos tiempo, unos cinco meses, quizá, ella estaba en la misma habitación soñando con su fiesta, con su vestido y sus invitados.

Hoy, cuatro meses después de su celebración quinceañera, Rubí Ibarra García está por lanzar su primer sencillo musical, tiene miles de seguidores y adonde quiera que llegue no hay quien no se acerque a pedirle un selfie. Su vida cambió, se transformó, y lo más irónico es que ella nunca lo buscó.

Burlas y críticas provocaron que, en varias ocasiones, al verse envuelta en un torbellino cibernético en el que abundaban memes suyos y de su familia, Rubí llorara, sufriera y viera el sueño de su fiesta truncado.

Mas su confianza y el apoyo familiar la hicieron sacar provecho de lo que ocurría. Finalmente, ella y su familia “no habían hecho nada malo” para estar lidiando con tan amargo rato.

Su celebración se convirtió en un show mediático, del que finalmente resultó ganadora.

Con 15 años Rubí está por sonar en las emisoras gracias a su música grupera- pop. Desde niña soñó con cantar.

Actualmente cursa primer año de preparatoria (noveno año de colegio en Costa Rica) y dice no perder su enfoque.

Rubí aprovecha las bondades de su destino y acepta todas las propuestas que la ayuden a crecer como persona y a atesorar los preciosos momentos de su particular juventud.

Como una adolescente normal, ella aspira a la universidad. Aunque podría pensarse que va a optar por alguna carrera artística o relacionada con la televisión, ella es firme al decir que no, la antropología y criminología son las carreras que se ve ejerciendo.

Con tono sereno, mucha madurez y agradecimiento, la famosa quinceañera conversó vía telefónica con Viva acerca de los drásticos cambios en su vida y de cómo fueron esos momentos en los que su fiesta de cumple se decantó como una avalancha.

¿Cómo ha cambiado su vida? Qué pasa con sus estudios y sus amigos?

Ha cambiado para bien. Sigo yendo a la escuela. Mis amigos me dicen que le eche ganas a lo que estoy haciendo. La verdad estoy feliz y contenta con el apoyo de la familia y los amigos.

¿Cómo la apoyan sus papás en esta nueva etapa?

Ellos siempre andan conmigo y me dan su apoyo y confianza. Es lindo que estén conmigo. Ahorita (momento en que se realizó la entrevista) salimos a comer y a pasar el rato. Estamos en un pueblo que se llama Charcas, queda como a 20 minutos de La Joya. Aquí hay Internet, donde vivo no, tampoco señal, por eso cuando salgo aprovecho para hacer publicaciones o transmisiones en vivo en mi Facebook. Cuando salgo también aprovecho para saludar a la gente que se me acerca.

Dice que en su comunidad no hay conexión a Internet, ¿cómo se dieron cuenta del video viral y de todo lo que estaba pasando?

Nosotros subimos el video, y mi hermana Beverly (estudiante de derecho) vive en un lugar donde hay señal nos contó que empezaron a compartir el video. Cuando fuimos a casa de mi hermana nos enseñaba memes y cosas. Ahí nos dimos cuenta que se hizo viral.

¿Qué piensa de que haberse convertido en un fenómeno viral le esté permitiendo todas estas vivencias? Hace poco conoció al cantante Maluma.

Pues sí es una locura esto que me está pasando, pero locura de la buena, estoy haciendo mi sueño realidad. Estoy agradecida con la gente que me quiere y con la que no. Nunca imaginé que iba a conocer a Maluma, yo iba solamente a divertirme a sus conciertos, jamás pensé en conocerlo, pero fue agradable. No era algo que me pasaba por la mente.

¿Siempre quiso cantar, soñaba con actuar? ¿Cómo toma todo esto que está viviendo?

Estoy preparando el sencillo en el género grupero-pop, desde que estaba chiquilla me gustaba cantar en festivales y reuniones familiares. Se me abrieron muchas puertas y muchas oportunidades, decidí aprovecharlas y hacer lo que me gusta que es cantar. La gente se ha portado muy linda conmigo, me ha demostrado su cariño y apoyo, me echan pura buena vibra. De la novela yo no sé eso de que me querían para una novela, si alguna vez me invitan a una novela aceptaría la oportunidad, sería un gran honor.

¿Había pensado en estudiar? ¿Qué carrera le gustaría?

Salgo de la preparatoria en dos años. He pensado en la criminología y en la antropología. No me llama la atención la televisión, me voy más por lo natural.

¿Cómo es que una muchacha de su edad hizo frente a esta situación?

Fue algo loco esto que sucedió. Jamás pensé que esto iba a pasar, mi fiesta de 15 era normal. No puedo creer todo la gente que había el día de mi fiesta. Todo lo enfrenté teniendo confianza, así fue como mi familia y yo enfrentamos todo: a la gente y a los medios; todo lo hicimos tomados de la mano de Dios y tuvimos fe de que todo iba salir bien. Estábamos en eso, no había vuelta atrás.

¿Qué pasaba en su familia cuando vieron que la invitación se convirtió en algo colectivo? ¿Se reían, lloraron, había preocupación de que no alcanzara el dinero para atender a tantas personas?

Al principio se pusieron tristes, pero mi papá y mi mamá estuvieron levantándome los ánimos. Luego nos encerramos a reír de todo. Creo que fue porque no había motivo para estar tristes, no habíamos hecho nada malo. La confianza de la familia, su cariño y las personas que nos apoyaron nos ayudaron a levantar el ánimo.

¿Cómo afronta los comentarios burlescos que se hacen en torno a usted? ¿Siente que ha sufrido mucho bullying ?

La verdad es que siempre habrá comentarios buenos o malos, todos te enseñan a madurar y a pensar más las cosas. Quiero decirles a todos que gracias y que bendiciones para todos. Estamos en un mundo en el que la gente se puede expresar.

¿Ha sentido la presión de la fama?

Sí. He sentido a veces un poco de presión por eso. Yo estaba acostumbrada a la vida de mi rancho donde era una niña normal que salía con sus amigas, ir al monte, ahí es muy tranquilo, me gusta la tranquilidad, no hay nada de estrés.

La vida le cambió…

Mi casa en el rancho es como mi escape de lo que vivo. Ahí es tranquilo, no hay gente mala, somos humildes, cariñosos, sencillos. Con esta experiencia pasamos de un mundo donde no hay nada, a un mundo donde hay todo. Quiero que me vaya bien, o si no, igual voy a seguir estudiando y preparándome.

¿Siente que perdió su privacidad? ¿Se ha sentido vulnerable al verse tan expuesta?

No, siento que mi privacidad no se ha perdido. Estar en esto no significa que no tengo una vida privada. Pienso que todo está separado.

¿Hubo momentos de tristeza o miedo cuando se convirtió en una persona viral?

Al principio yo lloré mucho porque me hacían comentarios malos. Yo le decía a mi mamá que no quería eso, pero luego me di cuenta que estamos en un mundo en el que nos podemos expresar, gracias a Dios hay más gente que me quiere.

Va a haber gente que no me va a querer, que no le va a gustar la idea de lo que estoy haciendo, pero que Dios los bendiga. Quiero enviarle saludos a la gente de Costa Rica que me quiere.

¿Cree que su forma de ser es lo que le ha abierto puertas?

Pienso que sí. Así soy, no voy a cambiar mi forma de ser, creo que eso no es necesario. Mi mamá me ha dado consejos de lo que es bueno y lo que es malo. Ella me ha enseñado que el mundo no es como lo pintan. Yo sé perfectamente que esta es mi forma de ser y que no voy a cambiar por nada. Soy un poco tímida, no soy tan sociable, no soy de las personas que tienen confianza de volada (muy rápido) con los demás.

¿Qué recuerdos tiene de su fiesta? Varios medios dijeron que usted estuvo triste, ¿fue cómo la imaginó?

Al principio estuve asustada porque era un mar de gente que no conocía, ya en la noche lo disfruté un poco. Lo de la chiva (en la que murió un hombre) fue un accidente, eso no me arruinó mi noche.

Hace un año ni se imaginaba que todo esto iba a pasar. Si pudiera devolver el tiempo, ¿qué cambiaría de todo lo que ha pasado?

No cambiaría nada, porque las cosas sucedieron como tenían que suceder: así Dios lo quiso, todo pasa por algo y ni modo.

¿Le ha aumentado el número de admiradores?

No tengo novio. Estoy enfocada en lo que estoy haciendo. Me han salido varios admiradores (risas).

¿Recibió muchos regalos? Cuáles le gustaron más?

Me gustaron todos, porque todos me los trajo la gente y para mí tienen valor por el sentimiento, por querer traérmelo. Fue lindo ver que la gente viajaba de lejos para verte y darte bendiciones.

Me dieron un carro, pero no me dieron casas, ni terrenos, eso es mentira. También recibí peluches, perfumes, ropa, cosméticos, bicicletas y una guitarra.

¿Cómo la ven ahora en el pueblo?

Donde vivo me ven igual, pero mi familia sabe que me voy a dedicar a esto y me dan consejos, hay unos que son críticos, es bueno que te lo digan.

¿Usted maneja sus propias redes sociales?

La de Instagram no, no tengo. Solo la de Facebook.

¿No pensó en invertir el dinero de su fiesta en un viaje?

No, yo quería la fiesta y mis papás también. No pensamos en un viaje. Antes de esto yo solamente estaba en mi rancho; con esta experiencia ya me subí en un avión, fui a varios programas en México y a Miami cuando me invitaron a Premios lo Nuestro. En ese lugar vi a gente totalmente diferente, allá se visten raro (risas).