Zozobra. La Policía de Miami Beach acudió ayer a la casa del rapero Lil Wayne , luego de recibir una alerta anónima sobre un posible tiroteo dentro de la lujosa mansión.
Según el reporte recibido por las autoridades, cuatro personas habían recibido disparos en el aparente suceso.
Cuando la policía llegó al lugar se desconocía si el rapero, de 32 años, se encontraba dentro de la casa. La duda persistía mientras la televisión local mostraba imágenes de la casa, totalmente rodeada por patrullas y un equipo SWAT.
Sin embargo, para alivio de los fans, el sello disquero de Lil Wayne informó ayer mismo que el cantante estaba bien.
“Wayne está bien. No estaba en casa cuando sucedieron los presuntos hechos”, indicó el sello Young Money en su cuenta de Twitter.
Más tarde, la Policía confirmó en rueda de prensa que todo se trató de una falsa alarma y que no se había localizado “ninguna víctima ni armas en el interior del la vivienda”, ubicada en una isla de Miami Beach.
El rapero tenía previsto dar un concierto hoy jueves en la Nova Southeast University, ubicada en Fort Lauderdale.
Wayne, múltiple ganador de premios Grammy, estuvo preso en el 2010 por posesión ilegal de un arma de fuego.