Lindsay Lohan intenta mantener su presencia en los titulares de diarios y revistas; sin embargo, la actriz de 25 años quiere que la razón detrás de páginas y páginas sea su carrera y no sus problemas con drogas y con la justicia.
La joven sirvió de anfitriona para el episodio más reciente de Saturday Night Live (SNL). Su desempeño la ha vuelto nuevamente el centro de atención, mientras algunos cuestionan si podrá dejar atrás su tormentoso pasado.
Éxito de audiencia. La aparición de Lohan en SNL consiguió 5,5 puntos de rating, cifra que colocó al programa como el segundo más visto de la nueva temporada. La protagonista de Chicas pesadas fue solo superada por el jugador de la NBA, Charles Barkley.
Así, con un guión que invitaba a burlarse de sí misma, Lohan derrotó a Daniel Radcliffe, Emma Stone y Melissa McCarthy como favorita de la audiencia.
En videos promocionales del episodio, Lohan aprovechó para desquitarse de los escándalos financieros y del acoso de la prensa, junto a Kenan Thompson, miembro del elenco regular.
“La gente probablemente se ha preguntado qué he estado haciendo”, afirma Lohan sarcásticamente, mientras Thompson responde: “Sí, todos te han puesto tan poca atención durante los últimos años.
“América pudo haber usado más información sobre mí e incluso una foto o dos”, finaliza la actriz, regalando a la cámara una larga mirada irónica.
Durante el monólogo de apertura del sábado, Lohan fue requisada por comediantes de SNL en busca de rastros de drogas.
Jimmy Fallon, exmiembro del show, hizo una aparición especial con el fin de tranquilizar a la anfitriona.
“Puedes hacer esto, pero si por alguna razón no puedes, Jon Hamm está listo para ser el anfitrión de repuesto”, afirmó, señalando al protagonista de Mad Men, sentado entre la audiencia.
No obstante, la crítica y la comunidad de Twitter fueron despiadadas con el papel de Lohan como anfitriona, señalando que contó con muy pocas líneas y tuvo problemas con el teleprompter.
¿Lista para el giro? En mayo, Lohan comenzará el rodaje de su primer proyecto en años: Liz & Dick, una cinta biográfica, en la que interpreta a Elizabeth Taylor.
Además, sus problemas legales podrían concluir este 29 de marzo, cuando se presente a su audiencia de libertad condicional. Durante la última sesión, la juez Stephanie Sautner felicitó a Lohan por sus avances.
“Parece que está logrando que su vida vuelva a encaminarse”, aseveró la funcionaria.
Para promocionar esta nueva etapa de vida, la joven ha emprendido una serie de entrevistas en Late Night with Jimmy Fallon y The Today Show.
En este último programa, Lohan aseguró al coanfitrión Matt Lauer que “irse de fiesta toda la noche ya no es algo que hago”. Sin embargo, la rubia fue vista hasta las 4 a. m., según reportó The New York Daily News.
Por su parte, Jo Piazza, de The Huffington Post, considera que aunque su interpretación no fue digna de un Emmy, “podría tratarse de los primeros pasos para reparar su deslucida carrera”.
Cooper Lawrence, autor del libro El culto de las celebridades, aseguró a la periodista que se ven vientos de cambio en la vida personal y profesional de Lohan.
“Ella mostró que quiere trabajar nuevamente. Estaba muy relajada, segura y profesional. Tal vez no fue divertida todo el tiempo, pero se cumplió, parecía sobria y no nos dio nunca la imagen de una drogadicta”.