Laura Zapata: “No veo reconciliación con las hermanas Sodi”

Conflicto La familia se distanció después de que la abuela de las hermanas se fracturara la cadera hace más de un año

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La actriz mexicana Laura Zapata, consagrada como la villana de villanas en las novelas, está de visita en Costa Rica para apoyar la caminata y carrera de la Fundación Ross contra el cáncer.

Zapata y otros artistas internacionales, entre ellos los actores Mauricio Henao, Laura Carmine, Azela Robinson caminarán el próximo domingo en San José.

La intérprete habló con Viva sobre su carrera y la deteriorada relación que tiene con sus hermanas: Thalía, Ernestina, Federica y Gabriela Sodi, después de tener varios desacuerdos sobre la atención y cuidado de su abuela Eva Mange.

¿Cómo está la relación con su familia, con sus hermanas?

Mi familia está maravillosa, mi familia la conforman mi abuela y mis dos hijos Claudio y Patricio. Ellos son como las joyas de mi corona como madre. Claudio está siendo reconocido como productor de teatro serio en México, es una bendición del cielo y es el resultado de que a pesar de que he sido una madre trabajadora y luchadora para educarlos y mantenerlos, ahí están los resultados. Patricio está en Los Ángeles practicando skateboard profesional, y está a punto de graduarse como Ingeniero Industrial. Esa es de la familia que te puedo hablar, de la familia que me interesa, que está junto a mí, que me ha ayudado en el camino de esta vida.

¿Cómo está su abuela doña Eva, después de su fractura de cadera?

Está muy bien, muy contenta. A sus 95 años está lúcida, absolutamente cuerda. La familia no te la da la sangre sino la constancia y el amor, ella está con unas personas que la cuidan mientras yo no esté, esa es la familia, la que se va haciendo en el camino, la sangre no te da el amor ni los lazos de respeto y cariño que los seres humanos necesitamos para desarrollarnos.

Entonces no tiene ningún tipo de relación con sus hermanas Thalía, Ernestina...

¡No, Dios me libre!, con personas que se han comportado de una manera tan grotesca mientras más lejos mejor.

El distanciamiento se ha dado por la responsabilidad de cuidar a doña Eva...

Desde que ella se fracturó me han dejado sola con esa responsabilidad, no solamente no la apoyan. Afortunadamente, no lo necesitamos, pero le han robado todo su patrimonio, todo lo que ella trabajó durante 30 años incansablemente. No le han devuelto su dinero, pues por una cuestión que a ellas les ha de parecer lógica, dijeron en una revista que no le querían dar nada a mi abuela porque cuando se muriera yo me iba a quedar con todo. ¡Imagínate ya están pensando en la muerte de mi abuela en lugar de estar pensando en darle vida!

¿Qué sentimiento le produce esta situación?

Como dice una canción de Cuco Sánchez: ‘Y cada quien tendrá su merecido’. Cada quien con su consciencia en soledad saben qué es lo que han hecho o no han hecho.

¿No hablan para nada, no hay ningún tipo de relación?

No puedo tener relación con alguien que le ha quitado la seguridad a mi abuela, no solamente no la han buscado o acompañado; ahora es demasiado tarde, ha pasado un año y cacho.

Pero, anteriormente, se apoyaban mucho unas a las otras...

Ellas dicen que yo me voy a quedar con ese dinero, pero yo no lo necesito, no lo he necesitado. Ellas sí han usufructuado con lo mío, les abrí las puertas, las conecté, a una le presté una casa durante 16 meses, a sus hijos los ayudé los saqué de problemas, les presté dinero para que compraran taxis, para que hicieran negocios.

¿No hay ninguna esperanza de reconciliación?

Ellas solo piensan en cuando se muera mi abuela, así que ¡qué barbaridad, qué miseria humana! Pobrecitas, es lo único que te puedo decir de estas personas que no son mi familia, no tenemos nada que ver. Somos de un grupo espiritual, ético y moral diferente.