José Kawas: Adiós al humorista que luchó sin rendirse

Este sábado 15 de julio, el intérprete de los personajes de Milton Crawford y Chito Pitt, falleció a los 47 años. Durante su lucha contra el cáncer, siempre mantuvo la sonrisa y la esperanza. Esta es su historia con el humor

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

José Kawas Rodríguez nunca soltó la fortaleza y el optimismo. Cuando le diagnosticaron cáncer de vesícula en abril del 2022 decidió no rendirse. Su espíritu de lucha lo abrazó al enterarse que la enfermedad había invadido su hígado. No dejó de perseverar durante todo su proceso.

Este 15 de julio, luego de estar bajo el cuidado de su familia en su casa, el humorista falleció a los 47 años después de que el cáncer que enfrentaba hiciera metástasis.

Cuatro días antes, el 11 de julio, su hermana Cata Kawas escribió un mensaje en el que contaba que el intérprete de los personajes Chito Pitt y el fanático liguista Milton Crawford estaba muy agradecido por los mensajes y oraciones que recibía por parte de las personas, solamente que por su estado de salud él no podía contestarles.

La lucha de José Kawas, humorista de Radio Omega (105.1 FM), comenzó en abril del 2022. Tras experimentar un fuerte dolor abdominal, acudió a emergencias y poco después se enteró que tenía cáncer de vesícula.

Su proceso lo enfrentó con valentía y lo iba narrando en su cuenta de Facebook. En setiembre, solamente cinco meses después, la enfermedad se extendió hasta el hígado. Nunca hubo reproches: de su parte solo existía el optimismo.

“No pienso rendirme, quiero quedarme de este lado más tiempo”, escribió en setiembre.

El humorista vivía agradecido. Daba las gracias por cada momento. Así lo hizo en diciembre, cuando fue parte del elenco del humor de las transmisiones de toros de Multimedios, canal 8.

“Por un momento pensé que no estaría este fin de año, pero decidí confiar en Dios que no me abandona y aquí estamos”, escribió el 25 de diciembre en una fotografía en la que apareció junto al presentador Giovanni Calderón.

Su mensaje fue similar el 27 de febrero, fecha en la que celebró los 47 años que cumpliría al siguiente día.

“Muy agradecido con Dios por permitirme cumplir un año más de vida. Llegué a pensar que no tendría esta oportunidad, pero aquí estoy, viviendo un día a la vez y cada uno como si fuera el último. Luchando sin rendirme”.

En su lucha contra el cáncer, proceso en el que pasó por sesiones de quimioterapia, Kawas no dejó de lado el humor y se mantuvo en su trabajo en los programas El manicomio de la risa y La risa se pega, ambos de radio Omega, trabajos que expresaba “le hacían muy bien” mientras luchaba.

Un locutor con cualidades para el humor

Fue en el 2016 cuando José Kawas entró a Radio Omega. En aquella época, cuando el grupo adquirió Radio Uno y Sabrosa, uno de los locutores de cabina que llegó fue él.

Su labor en el dial era seria y profesional, aunque cuando el micrófono se apagaba las voces y personajes empezaban a resonar por los pasillos. Carlos Álvarez, director de El manicomio de la risa (en aquellos tiempos), decidió ficharlo.

Tras aquella oportunidad los personajes de Milton Crawford (liguista muy fiebre) y de Enemilson (saprissista), figuras antagónicas con las que Kawas pasaba de imitar una voz chillona a una grave, empezaron a llamar la atención de Álvarez, quien notó la gran habilidad.

Ya en el humor, Kawas, quien personalmente era muy introvertido, pero sacaba su faceta extrovertida cuando hacía voces, empezó a emular al conocido locutor El Maleku y fue cuando Álvarez le pidió que creara a Chito Pitt, un vendedor de tiliches. A este personaje se le unió una señora que era la animadora de “un night club de mala muerte”, recordó Carlos Álvarez.

Para Álvarez, abrirle las puertas del humor a Kawas (y al mismo tiempo a Rigoberto Gallina Alfaro) y acompañarlo en su proceso de crecimiento, permitió que lo viera como un hijo: uno que era un poco rebelde, pero el más bueno y al que él siempre buscaba “arropar más”.

En una de sus “rebeldías”, describe Álvarez, José Kawas dejó Omega y se fue a trabajar en otros proyectos.

En el 2017 el humorista regresó a su casa radial y, justamente en ese tiempo, Carlos salió para asumir la dirección de Teletica Radio. El vínculo entre ellos permaneció, pues además trabajaron juntos varias temporadas de las transmisiones de toros de canal 7.

Regresar a Omega y al Manicomio de la risa fue una alegría inmensa para Kawas, quien en el 2017 dijo en entrevista a La Nación que el programa buscaba hacer reír a las personas y ser ese momento del día en el que se olvidaban de cualquier inconveniente.

“Todos tenemos problemas, y nosotros somos ese desahogo de la gente”, afirmó Kawas aquella vez.

Como se mencionó, durante su lucha contra el cáncer y proceso de quimioterapia, él continuó haciendo reír a las personas. Siendo ese desahogo para ellas y también para sí mismo.

“La enfermedad tiene esos matices: hay tiempos en los que las personas están muy bien. Así estuvo Kawas. De quimio había días en los que obviamente le preguntaba cómo se sentía. Si tenía quimio viernes lo incorporaba martes o miércoles y, en ocasiones, lo ponía en la tarde por si la quimio no lo dejaba dormir bien. Lo veíamos bien, se sentía en buenas condiciones”, comentó Álvarez.

Carlos Álvarez, quien desde el 2022 es el encargado de coordinar los elencos del humor de El manicomio de la risa y La risa se pega, comentó que Kawas siempre le expresó lo bien que le hacía trabajar. “Me decía: esto me ayuda muchísimo, me da fuerza; me alegra y me motiva’”.

Kawas salió de la radio hace poco más de dos meses. “Siempre mantuvimos contacto, aunque hablábamos menos. Su papá me dijo que ya había empezado su proceso final. Un TAC reveló que el cáncer había hecho metástasis”, lamentó Álvarez. “Fue un valiente”, agrega.

José Kawas y su pareja, Francela Casanova, criaron a una adolescente que ahora tiene 15 años.

“Sé que la gente no habla mal de quienes han partido (...), pero hay gente que merece que se diga todo lo que fue, con él nos quedamos cortos. Al final de su vida dio lecciones que todos deberíamos de ver y escuchar. Dicen que la gente buena no dura tanto: con él se cumple”, expresó.

La vela de José Kawas Rodríguez se realizará este 15 de julio a las 2 p. m., en Jardines del Recuerdo, en Los Yoses.

Un humor singular

Rigoberto Alfaro, mejor conocido como Gallina, trabajó con José Kawas durante 10 años. A los dos se les abrió la misma puerta en Omega en el 2006 y forjaron una relación de respeto y admiración.

“Éramos dos muchachos a los que les gustaba vacilar. Kawas era muy alegre. Tenía un humor singular. Era serio pero salía con bromas. Hicimos shows juntos. Compartimos anécdotas”, rememoró Gallina.

El humorista recordó que él estuvo en contacto con José durante este proceso, en el que reconoce que su amigo y colega “iba saliendo adelante”.

“Tomo esta noticia con mucha tristeza, fue mi compañero durante muchos años, una persona que inició conmigo. Aunque también reconforta saber que Dios lo recibió. Ya él está en un mejor lugar”, concluyó.