El actor James Franco y sus asociados acordaron pagar la suma de $2.2 millones (casi ¢1.400 millones) para resolver una demanda por supuesto abuso sexual en la que unas estudiantes aseguran que las obligaron a realizar escenas explícitas ante la cámara.

Así lo informó el sitio The Hollywood Reporter, que agregó que el acuerdo deberá ser sometido a un juez de Los Ángeles para su correspondiente aprobación.

La demanda se presentó en octubre del 2020, cuando dos antiguas alumnas de la escuela de actuación de Franco alegaron que ellas y otras cuatro estudiantes habían sido víctimas de fraude por parte de Studio 4 Film School.

La demanda afirma que Franco, actualmente de 43 años, y sus socios favorecieron “un comportamiento inapropiado con carga sexual hacia las estudiantes, al usar su poder como maestros y como empleadores, poniendo en juego la oportunidad de desempeñar roles en sus proyectos”.

En primer momento, los representantes legales del actor habían descalificado los alegatos y proclamaron que las acusaciones eran “falsas e incendiarias”.

Detalles del acuerdo

Por lo general, lo estipulado en este tipo de negociaciones se realiza con carácter confidencial, sin embargo, por tratarse de un caso que involucra a una institución educativa, un juez debe revisar que los términos del acuerdo sean justos para aquellas personas que no van a acudir a un proceso judicial.

Una de las estudiantes recibirá $670.000 (unos ¢420 millones de los cuales ¢140 millones irán a sus abogados). La otra recibirá $223.500 (unos ¢140 millones de los cuales ¢46 millones serán para sus representantes legales). El resto será distribuido entre las otras estudiantes involucradas en la demanda y sus abogados.

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Asimismo, el acuerdo establece que las demandantes deben liberar a Franco y sus asociados de cualquier alegato de fraude y aprobaron el siguiente texto: “Aún cuando los demandados continúan negando las acusaciones en la demanda, reconocen que las demandantes han planteado asuntos importantes; y todas las partes creen firmemente que ahora es un momento crítico para enfocarse en abordar el maltrato a las mujeres en Hollywood”.

“Todas coinciden en la necesidad de que asegurarse de que nadie en la industria del entretenimiento -sin importar raza, religión, discapacidad, etnicidad, procedencia, género u orientación sexual- enfrente algún tipo de discriminación, acoso o prejuicio”, añade el documento.

Las estudiantes habían hecho públicas las acusaciones contra Franco luego de que el actor ganara un Globo de Oro, en 2018, por The Disaster Artist.

En abril anterior, la actriz Charlyne Yi, quien participó en el mencionado filme, calificó al actor como un “depredador sexual” y afirmó que no se sentía segura en el set de filmación.

En el 2017, Franco enfrentó una serie de acusaciones por conducta sexual inapropiada. Según los informes de entonces, una colegiala de 17 años compartió mensajes en los que el actor, de 35 años en ese momento, la invitó a su cuarto de hotel.

En mayo anterior, Seth Rogen, amigo y colaborador frecuente de Franco, aseguró que no tenía planes de volver a trabajar con él. Ellos habían compartido créditos en producciones como Pineapple Express y This Is the End.