El funeral de Nelson Mandela no fue de solemnidad completa.
El presidente Barack Obama y el primer ministro británico David Cameron se inclinaron para posar para un autorretrato o selfie que se estaba tomando la primera ministra danesa Helle Thorning-Schmidt, en el gran estadio de fútbol donde Mandela fue despedido por miles de personas.
La esposa de Obama, Michelle, aparece muy seria junto a su esposo, sin posar para la foto, cuyo momento fue capturado por un fotógrafo en el lugar.
Otras fotografías tomadas durante el funeral muestran a Obama conversando animadamente con la primera ministra y a la señora Obama, ya un poco más sonriente, hablando con ella también.
El hecho anecdótico se da pocos días después de que selfie fuera escogida como la palabra inglesa del año por Oxford Dictionaries.
Los mandatarios formaron parte de las decenas de líderes y miembros de la monarquía que se reunieron en Sudáfrica para un homenaje a Mandela, quien falleció el 5 de diciembre anterior.
Supuestos celos. Las redes sociales y los medios de comunicación internacionales se movieron este martes gracias a las fotos.
De acuerdo con el periódico El País de Uruguay, la primera dama estadounidense se mostró molesta y celosa por la actuación de su esposo. “Una secuencia de fotos muestra a Barack Obama riendo con los otros dos líderes mundiales. Sin embargo, Michelle aparece con cara de pocos amigos. La expresión de Michelle desató cientos de comentarios en las redes sociales. En la siguiente foto se ve como la primera dama norteamericana cambio lugares con su marido”, escribió El Universal.
Por su parte, el New York Post también aduce una escena de celos.
“La primera dama miró al frente y no hizo caso de la demostración de las habilidades con el teléfono de su marido”.