Luis Gómez, torero improvisado a quien todos conocían como ‘El Diablo’, falleció este lunes 20 de febrero.
El guanacasteco tenía 62 años y, por muchos años, fue uno de los rostros más reconocibles de las corridas de Toros de Zapote. La noticia la confirmó Nesta Villalobos, amigo cercano del improvisado.
Con una suerte de máscara en la que le colgaban dos cachos, Gómez fue uno de los personajes más queridos del redondel. Siempre aparecía con gran valentía frente a los toros, además de siempre mostrarse como una persona amable frente a la cámara.
Gómez, quien se había retirado de las corridas hace tres años, sufrió en las últimas semanas dos paros cardíacos que lo mantenían delicado en el hospital.
El pasado jueves sufrió un paro cardíaco mientras estaba internado en el hospital de Nicoya y el domingo fue trasladado de emergencia al hospital México, luego de que se complicara su salud.
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El improvisado se retiró de las corridas en el 2018, luego de que el toro El Sarampión le pegara una terrible cornada. De dicha embestida le causó la amputación de su pierna derecha.
Gómez se dedicó por 30 años a las corridas de toros. En el 2018, tras recuperarse de la operación, le dieron un reconocimiento por su trayectoria en Zapote donde gozó del aplauso del público y de sus compañeros.