Libros, cine y comida se dan cita en fiesta singular

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Quizás sea común decirlo, pero hay dos aromas irresistibles: el del pan recién horneado y el de un libro viejo (¡aunque también los nuevos huelen bien!). Este fin de semana, ambos olores se mezclan en el restaurante Manos en la Masa, donde tres librerías se unieron para organizar una Fiesta Comelibros.

En el segundo piso del local, donde platos de brunch rebosantes de pan, queso y huevos deleitan a los comensales, varios estantes repletos de libros reciben a ávidos lectores y curiosos. Las librerías Duluoz, Andante y Buhólica son los artífices del encuentro, que empezó el viernes y concluirá hoy.

“Queremos convocar a varios actores de la escena literaria, independientes todos, para hacer una feria que les quitara ese tono frío o ceremonioso que se les da a los libros”, dijo Diego Jiménez, de Buhólica. Su receta: karaoke, cerveza, libros.

‘Queríamos acompañarlo de música, de comida, de cine, en un ambiente donde la gente no sienta que debe entrar, comprar e irse, sino compartir con los amigos’, comentó el librero.

Aparte de libros ilustrados, poemarios y novelas de las tres librerías, se encuentran puestos de cinco editoriales ticas (Uruk, Germinal, Rea, Espiral y Perro Azul), Encuadernación Zen, el cómic Ornitorrenco y lo empujan y Eureka, con libros usados, entre otros.

Desde las 10 a. m. de hoy tendrán una pequeña agenda para niños: cuentacuentos con Anacristina Rossi (Ana Rana tiene sed) y Daniella Valenciano (1 p. m.). A las 3 p. m. pasarán la película Bonsái, basada en el libro de Alejandro Zambra.

Y, como un alegre bonsái, la feria es más grande de lo que parece: es del tamaño de lo que el lector encuentre en sus libros.