Días santos traen diversión para la familia

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La Semana Santa llega y  son muchos los costarricenses que hacen planes para sacarles provecho a estos días, en compañía de la familia y amigos. En Costa Rica, las opciones para darse un paseo sobran, así que, como una  ayuda, le ofrecemos tres propuestas que, de seguro, le gustarán.

Se trata de la Hacienda Nosavar, en el Pacífico central; el INBioparque, en Heredia, y el Parque de Diversiones, en La Uruca, San José, permiten disfrutar al máximo diversas propuestas y  en un solo día.

Diversión en tierra y agua.@ En Tárcoles, de camino a Jacó, en el Pacífico costarricense, se extienden las 650 hectáreas de la Hacienda Nosavar, territorio dedicado a la aventura, la naturaleza y el  sano entretenimiento.

En el lugar, el visitante encontrará opciones tan variadas como distintos tours a caballo, paseos en bicicleta de montaña con distintos tipos de dificultad, caminatas de observación de naturaleza y un paseo lleno de adrenalina  en un airboat  en el río Grande de Tárcoles.

La aventura sobre el lomo de un caballo comienza en Nosavar con una clase de normas de seguridad básicas para cabalgar.

Luego, Federico Cambronero, gerente y guía experto, o alguno de los entusiastas trabajadores de la hacienda, le ayudarán a subir al animal elegido y le ajustará la silla de montar para su mayor comodidad. Después de esto, comenzará la diversión.

Una vez sobre el caballo seleccionado, las opciones son varias. Puede escoger  una cabalgata por los senderos de la hacienda, un recorrido que puede extenderse hasta por una hora y media.

La otra posibilidad es conocer la hacienda ganadera. Esto permitirá le conocer muchas de las experiencias de un verdadero ganadero y aprender de las diferencias entre ganado brahman o angus, entre otras.

Incluso, los más entusiastas podrán participar de la experiencia de arrear ganado; desde luego, le tocarán  reses o terneros inofensivos, pero es realmente única la emoción de cabalgar y ver moverse al hato  a las órdenes del jinete.

Dos ruedas.@ Lomas y mucho camino llano de lastre hace de Nosavar una opción atractiva para quienes aman subir en una bicicleta y sentir el viento en el rostro.

Hay varios trillos que harán a los experimentados sudar la gota gorda; sin embargo, si solo se quiere disfrutar de pedalear, con el calor veraniego del Pacífico, también es posible.

 De igual manera, se pueden hacer caminatas por los senderos de Nosavar pasando cerca del río o  de los humedales. Con algo de suerte, en una caminata se pueden ver monos cariblancos y congos, serpientes, pizotes y muchas aves, como la lapa roja.

Finalmente, una de las novedades de la hacienda es el paseo sobre el río a bordo de un airboat. 

Se trata de un bote con un motor que da potencia a una enorme hélice  para impulsarlo sobre las aguas. Este airboat le permite ir río arriba, algo que no hace ninguna otra de las embarcaciones turísticas del lugar.

Y  no solo eso, también hace el paseo a una velocidad que pone a la adrenalina a recorrer el cuerpo.

El tour dura unos 70 minutos, tiempo suficiente para observar la gran diversidad de cocodrilos –algunos muy de cerca, visitar un afluente del río con agua cristalina y llegar a la  zona donde se dice que vive el cocodrilo de mayor tamaño del lugar.

Además, se le hace ver al visitante cuanto daño hace la contaminación del hombre y sus consecuencias en el medio ambiente de la zona.