Reseña: Resistencia e intelectualidad

Hablamos acerca del libro "La lógica de la nostalgia (imperial). Literatura y política en el siglo XX", de Rodrigo Quesada Monge

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La reciente entrega de distinciones del Ministerio de Cultura y Juventud otorgó a la obra La lógica de la nostalgia (imperial). Literatura y política en el siglo XX , del prolífico historiador y escritor costarricense Rodrigo Quesada Monge, el Premio Nacional Aquileo J. Echeverría en la categoría de ensayo del año 2015.

A criterio del jurado calificador que concedió el galardón, existe evidencia de una investigación rigurosa y un proceso de madurez temática y escritural, asociada con un sentido crítico, original y erudito de la propuesta del autor.

Publicada de forma conjunta, por la Editorial de la Universidad Estatal a Distancia (EUNED) y la editorial independiente chilena Nadar Ediciones, La lógica de la nostalgia... constituye un sólido esfuerzo de Quesada Monge por adentrarse en el estudio de la sociedad contemporánea, dejando ver una preocupación que ha sido una constante a lo largo de su vida, como es el estudio del imperialismo en sus distintas formas y representaciones.

La obra está compuesta por dos ricos y amplios ensayos, surgidos en distintos momentos. De acuerdo con su autor, estos textos derivan de las reflexiones acerca del escenario que dejó tras de sí el desgaste, de distinta naturaleza, experimentado por el socialismo real, tras la caída del Muro de Berlín en 1989 y el colapso de la Unión Soviética en 1991, ambos eventos sintomáticos del cuestionamiento hacia el fallido modelo heredado de la Revolución bolchevique.

El primero de los ensayos titulado “La lógica de la nostalgia (imperial)” reúne un conjunto de reflexiones articuladas alrededor de la nostalgia y la utopía, teniendo como telón de fondo el imperialismo.

Se presenta aquí un interés por el estudio de la actuación del ser humano bajo los sistemas autoritarios en la sociedad contemporánea; hombres y mujeres oprimidos, quienes, por el miedo a la libertad, hicieron concesiones que los situaron al borde del abismo.

Al recuperar inquietudes presentes en obras suyas como El siglo de los totalitarismos (1871-1991) ; América Latina 1810-2010. El legado de los imperios o bien, Recuerdos del imperio: los ingleses en América Central (1821-1915) , Premio Cleto González Víquez de 1998, Quesada Monge sostiene, sin reserva, que la nostalgia imperialista llevó potencias como Gran Bretaña, Francia, Alemania, Rusia y Japón, a involucrarse en guerras, en el transcurso del siglo XX, “en las que la destrucción de los imperios coloniales se entendía como la demolición simultánea de formas de vida, que se negaban a desaparecer, por más aferrados a sus rituales que estuvieron políticos, empresarios, pensadores y artistas”.

La forma en que el imperialismo impacta en el mundo contemporáneo, desde la atmósfera de poder hasta la vida cotidiana de quienes habitamos el Tercer Mundo, son preocupaciones constantes en la producción intelectual de Quesada Monge, que no pasan inadvertidas en esta obra.

Es preciso anotar que, como un eje transversal, el anarquismo confeso de su autor tiene un peso predominante en el enfoque que se ofrece. Y tal asunto no resulta extraño si se toma en cuenta su producción editorial reciente en esta área: Anarquía. Orden sin autoridad (2013); La fuga de Kropokin (2013) y Eliseo Reclus. Geógrafo anarquista (2016).

El segundo de los ensayos se denomina: “Óscar Wilde y Reinaldo Arenas. Enigmas de pasión”. Apóstol de la libertad y crítico severo de todo régimen que oprima las libertades individuales, independientemente de su naturaleza, Quesada Monge despliega aquí un profundo y fértil análisis de las circunstancias particulares que rodearon la propuesta política y artística de figuras de la talla de Wilde, sancionado por la justicia victoriana y desacreditado por su múltiple condición de irlandés, socialista y homosexual; así como de Reinaldo Arenas, notable novelista, dramaturgo y poeta, que debió asumir, desde la disidencia y con el estatus de minoría sexual, el impacto que tuvo la Revolución cubana sobre sus condiciones de existencia.

Hombres de diferentes épocas que desarrollaron un talento singular bajo regímenes, donde el tema de la libertad es un asunto de Estado, Wilde y Arenas, son humanizados y puestos en escena en un texto comprometido y de alto contenido político.

Este, sin duda, es un trabajo que merece ser leído con detenimiento, con una mirada desprovista de prejuicios y una disposición a hurgar en el complejo funcionamiento del mundo contemporáneo.