Regresa a las tablas una mirada íntima a la soledad de una mujer

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Estamos en el hogar de Hortensia. Vulnerable, reveladora y ansiosa por comprenderse, nos deja acercarnos. Su cuerpo se hace transparente en escena: Sobre mi casa una nube roja no se guarda nada.

La obra volverá a escena en el Teatro Impromptu Giratablas el viernes y el sábado , antes de que sus creadoras, el grupo Proyecto En Rojo , partan hacia México al VI Festival Internacional de Teatro Independiente Otra Latitud (Chiapas).

Sobre mi casa una nube roja es dirigida por Aysha Morales, como parte de un proceso de creación colaborativa, en el que Laura Cordero actúa, Alejandra Marín elabora la escritura escénica, Mariela Richmond el diseño de la gráfica y objetos, y Micaela Piedra, el diseño y la producción de vestuario. La iluminación es de Rafa Ávalos.

Es una pieza creada para adaptarse a espacios no convencionales; se estrenó en El Sótano en el 2013. “Es sobre la soledad, sobre cómo una mujer u hombre se encuentra en una búsqueda de autodescubrimiento”, explica la actriz, Laura Cordero.

Se trata de una obra que dialoga con el entorno que habita. Cada vez que se remonta, exige a sus creadoras un replanteamiento de los movimientos y la forma en que Hortensia, la protagonista, transita frente a la audiencia.

“A Hortensia hace tres años empezamos a crearla y aún hoy estamos empezando a entenderla. Creamos un acertijo que habla sobre el mundo y sobre nosotras”, afirma Cordero.

Para las artistas, madurar el proyecto y llevarlo de gira lo ha convertido en una forma de aprendizaje. “Una pocas veces tiene tanto tiempo para ir trabajando con una actriz. Vas desarrollando estrategias y mecanismos para mejorar el trabajo de ambas. Nos ha permitido profundizar con el personaje y la búsqueda escénica, pues está dentro de lo performático, en muchos momentos”, dice Aysha Morales, directora escénica.

Al cambiar de casa, se replantea sus enfoques. “El vestuario también cambió por completo. Está menos densa, más próxima, menos oscura, más cercana a nuestras realidades y momentos en casa íntimos y cotidianas”, comenta la actriz.

Es una pieza que desafía por su contenido, pero también por la producción, como les ocurre a tantos grupos independientes. “Hay que estar en riesgo porque ahí nos descubrimos, si nos quedamos quietas, no pasa nada; en riesgo, vamos a llegar a nuevos lugares de nosotras mismas”, considera Cordero.

Proyecto En Rojo se encuentra desde ahora pensando una nueva pieza; será para espacios convencionales, pero con más actores: otro viaje, otro riesgo.

La obra Sobre mi casa una nube roja estará en el Teatro Impromptu Giratablas (San Pedro). Las entradas valen ¢3.500 durante la preventa y ¢4.500 el día de la función. El espectáculo empezará a las 8 p. m. Luego, irán al VI Festival Internacional de Teatro Independiente Otra Latitud.