Un nuevo proyecto de ley pretende una significativa reforma al programa de Premios Nacionales que desarrolla el Ministerio de Cultura desde 1962.
Dicho proyecto –presentado por la diputada liberacionista Alicia Fournier– ya ingresó a la corriente legislativa y consta en el expediente 17.853 .
De ser aprobado, este nuevo documento derogaría la actual Ley sobre Premios Nacionales de la Cultura N°7.345, del 24 de mayo de 1993, y todas sus reformas.
Rangos más amplios. El principal giro que propone esta iniciativa es la definición de nueve categorías generales que sustituirán a los premios específicos actuales.
La ley vigente define tres premios: Magón (máximo reconocimiento por parte del Estado a un escritor, artista o científico costarricense por su obra realizada en el campo de la creación o de la investigación), Aquileo J. Echeverría (premia las mejores obras del año en distintos campos como novela, historia, teatro, música y artes plásticas) y Joaquín García Monge (galardón a la divulgación y promoción cultural).
Además ,se otorgan otros premios que fueron establecidos vía decreto ejecutivo como el Pío Víquez (trayectoria periodística), Antonio Obando Chan (mérito civil), el Premio Nacional de Cultura Popular Tradicional y el Premio Clodomiro Picado Twight, este último con un apartado en ciencia y otro en tecnología.
En cambio, la propuesta de ley define un total de diez premios: el Magón y otros nueve galardones correspondientes a igual número de categorías, un rango mucho más amplio.
De este modo, se establece, por ejemplo, un Premio Nacional en Artes Escénicas que abarca las siguientes áreas: artes circenses, danza, teatro, narración oral escénica, así como la investigación, gestión, capacitación, producción, promoción, y divulgación de las artes escénicas.
La producción literaria en todas sus vertientes y los trabajos periodísticos quedarían cobijados bajo la sombrilla del Premio Nacional en Información y Literatura.
Según el proyecto, este premio comprende artículos de opinión, periodismo cultural, literatura, edición literaria, docencia, gestión, promoción, investigación, coleccionismo, comercialización y restauración, entre otros aspectos asociados al campo literario.
Ese es el mismo patrón que sigue el resto de las categorías, como el propuesto Premio Nacional en Artes Visuales y Diseño, el Premio Nacional en Cine y Audiovisuales, el Premio Nacional en Música y el Premio Nacional en Patrimonio Material.
Supervisado. Consultada sobre este tema, la diputada Fournier afirmó que el proyecto se elaboró con la aprobación y supervisión del Ministerio de Cultura.
El jerarca de esa cartera, Manuel Obregón, confirmó a La Nación que esta propuesta de reforma a los Premios Nacionales es producto de un estudio conceptual y operativo realizado por la Dirección General de Cultura del Ministerio que encabeza.
El Ministro defendió la creación de categorías más amplias para poder cubrir la diversidad de manifestaciones artísticas culturales que existen actualmente.
Siguiendo la lógica del nuevo proyecto, los interesados en optar por el premio en Artes Visuales y Diseño podrán postular una pintura, un portafolio de fotografías, una escultura, la curaduría de una exposición, la restauración de una obra o un proyecto de difusión del arte en comunidades indígenas, por ejemplo.
El ministro Obregón no encuentra ningún inconveniente en poner a competir productos culturales de origen tan diverso.
“La cultura es una dimensión en perpetuo cambio, lo cual se traduce en el incremento de los ámbitos de desempeño y de las áreas de especialización”, explicó.
“En el pasado se procuró afrontar esta situación con la creación de premios que apuntaban hacia la especificidad de los campos; sin embargo, aunque estas medidas se formularon a partir de muy buenas intenciones, con el tiempo se han mostrado insuficientes y hasta contraproducentes”, añadió el jerarca.
Tanto el ministro Obregón como la diputada Fournier señalaron que las especificidades de esas categoría podrían detallarse en el reglamento que acompañará a la nueva ley.