La muerte nos provoca desde los Museos del Banco Central

Reflexiones. En cinco ejes temáticos, La ineludible muerte explora las diversas imágenes y percepciones acerca de esta certidumbre

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Una visitante inevitable y aborrecida, provocadora y desconcertante, que cuenta con una enorme cantidad de representaciones en la historia, está instalada en los Museos del Banco Central (bajos de la Plaza de la Cultura). Es la muerte.

La diversidad de imágenes y percepciones que ella provoca quedan en evidencia en un recorrido por 112 piezas llamado La ineludible muerte, exposición temporal que se abrirá este viernes 19 de febrero .

Esta propuesta, resultado de la investigación y planteamientos de las curadoras María José Monge y Priscilla Molina, explora un nutrido conjunto de interpretaciones y concepciones de la muerte, abordada como “una construcción social, particular y compleja”.

El público encontrará objetos arqueológicos, obras de arte costarricenses, trabajos de imaginería religiosa, videojuegos e imágenes de medios y la industria del entretenimiento. Es decir, la exhibición incluye desde creaciones indígenas del 300 antes de Cristo hasta piezas de arte contemporáneo y videojuegos, por ejemplo.

Cinco temas. La exhibición no está planteada en orden cronológico, sino como un diálogo entre objetos alrededor de cinco ejes temáticos.

Lo ambiguo de la muerte aborda las contradicciones que provoca, el tabú y las transgresiones. Aquí, por ejemplo, están los videojuegos y las series de televisión, en las que la muerte se vuelve entretenimiento.

También se trabaja el tema Buena muerte-mala muerte : la primera relacionada con un fallecimiento tranquilo y natural, y la segunda con situaciones violentas o trágicas. Un jarrón trípode con cuerpos descarnados (creado entre los años 300 y 800) es clara muestra de este apartado.

El “aquí” y el “más allá” acerca de la relación entre las prácticas que se realizan en este mundo y se vinculan con “el más allá” –incluso, cuando se plantee que no hay nada más– . Un trabajo representativo: Ensayos de resurrección , de Adolfo Siliézar, ensamble de madera quemada y pintura al óleo.

Los desafíos que planteamos para salvarnos o alargar la vida están en Vencer a la muerte. Dos series de la fotógrafa Elisa Bergel no dejan partir a familiares fallecidos.

Por último, lo transitorio de la vida y la certidumbre de la partida suscitan reflexiones en Recordatorios de muerte . Un tríptico fotográfico de José Alberto Hernández, titulado Existencia , no deja lugar a dudas: todos seremos un cuerpo sin vida tapado con una sábana.

Los datos imprescindibles

¿Qué? Exposición temporal con 112 piezas entre objetos arqueológicos, imaginería religiosa, obras de arte costarricense, fotografías históricas e imágenes de los medios y de la industria del entretenimiento.

¿Dónde? Los Museos del Banco Central, ubicado en los bajos de la Plaza de la Cultura. Horarios y entradas Abren todos los días de 9:15 a. m. a 5 p. m. La entrada cuesta ¢2.000 para costarricenses y ¢5.500 para extranjeros.

Dos de las actividades complementarias: El martes 8 de marzo, a las 3 p. m., habrá un espacio para compartir con las curadoras; además, el jueves 21 de abril, a las 6 p. m., se realizará un conversatorio llamado Imágenes de la muerte . Posteriormente, se efectuarán un laboratorio de cultura visual, un taller y una visita a un cementerio.