Indígenas se convertirán en diablitos en Rey Curré

Se trata de tradición que evoca la lucha entre borucas y españoles

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Rey, Curré, Buenos Aires. Los diablitos no paran de tallar sus máscaras, alistar sus vestuarios y disfrutar de lo que será el tradicional juego de esta comunidad, el cual se iniciará el próximo 2 de febrero y culminará el 5 de ese mes.

“¿De qué se trata? Esta es una tradición anual que realizamos los indígenas de Rey Curré. Nosotros nos vestimos con sacos, nos ponemos máscaras de balso y se adornan con las hojas secas de los bananales que abundan en las riberas del río Grande de Térraba.

“Esta es la tradición más conocida de la cultura boruca y a la que más asisten nacionales y extranjeros”, explicó Uriel Rojas, uno de los coordinadores del evento.

Detrás de la organización de este juego, que dura tres días, está una comisión cultural que se preocupa de tener listos todos los detalles antes y durante el desarrollo de esta actividad. “Aquí se involucran por igual hombres, mujeres y niños”, comentó Rojas.

Esta tradición es la representatividad de una fase del pasado, precisamente la que evoca la lucha entre los ancestros borucas y los españoles. “Los descendientes actuales hoy lo recuerdan como una triste historia y, por eso, realizan esta tradición todos los años”, manifestó .

Preparativos. Días antes de la fecha mencionada, la comunidad dona víveres y colabora organizándose.

En cada familia se prepara la chicha que repartirán por tres días a los diablitos y demás visitantes. Con alegría esperan, además, la visita de sus seres queridos que viven fuera del territorio indígena, así como de amigos que se apersonan en estas épocas especiales.

Rey Curré es la cabecera del territorio que lleva el mismo nombre y cuenta en su centro con más de 450 personas. La jurisdicción total de sus tierras supera las 10.600 hectáreas, y sus habitantes están regidos políticamente por una asociación de desarrollo indígena.

Su idioma materno es el boruca, aunque son pocos los que saben algo de esta lengua.

El Juego de los Diablitos cuenta con cabecillas que guían al grupo, al cual les llaman “los mayores”, que gozan de autoridad para dar órdenes durante el juego.

“Tanto el toro como los diablitos tendrán una reñida lucha por tres días, aunque al final –dice la historia– ganan los indígenas, quienes celebran a lo grande, como muestra de que han triunfado sobre el toro. Han ganado la lucha y un año más han rejuvenecido su identidad cultural”, indicó Rojas.