En Fragmentos: la permanencia del cuerpo o la fragilidad del ser , la identidad es un traje que se viste y desviste. Los actores Alonso Chaves y Melvin Jiménez recogen, entre un “mar de plástico”, los moldes que los definen en sociedad.
Mientras juegan a convertirse en otros hombres, se burlan de lo imposible que es calzar en esos papeles.
La obra tendrá funciones en La Casona Iluminada –barrio Amón– hasta el domingo 19 de marzo. Las presentaciones serán viernes y sábado, a las 8 p. m.; domingos, a las 6 p. m. Las entradas cuestan ¢5.000.
El trabajo se estrenó en el 2016 después de una investigación entre los actores, el escritor Estefan Esquivel y el director Ricardo Tames.
“La masculinidad nos llamaba la atención”, asegura Tames. “Vivimos en una sociedad en la que tenemos que tener cierta identidad y logros que nos bloquean mucho. Creemos que el humor atrapa a la gente y hace que empatice con los personajes”.